Las multas por aparcar mal sin saberlo: 7 errores comunes que muchos conductores cometen
Errores que muchos conductores ni siquiera son conscientes de cometer
Dejar el coche aparcado más de 30 días en la calle: riesgos y sanciones, según ordenanzas locales
Aparcar mal no es solo dejar el vehículo en doble fila o en una zona de carga y descarga claramente señalizada. Y es que, a menudo, son los pequeños detalles y errores inadvertidos al estacionar los que pueden derivar en sanciones económicas importantes. La Dirección General de Tráfico (DGT) es especialmente estricta en este ámbito, ya que un aparcamiento incorrecto puede poner en riesgo la seguridad vial, generar atascos y causar molestias a otros usuarios de la vía pública.
Según un informe reciente, muchos conductores son sancionados por errores que ni siquiera son conscientes de cometer. Por ese motivo, aquí repasamos los siete errores más comunes, y las multas asociadas a ellos que podrían sorprender a más de un conductor despistado.
Aparcar en sentido contrario al de la marcha
Una práctica bastante frecuente, especialmente en calles de doble sentido con poco tráfico, es aparcar en dirección contraria a la marcha. Sin embargo, este comportamiento está estrictamente prohibido según el Reglamento General de Circulación. La razón es que al estacionar así, el vehículo debe realizar maniobras adicionales que pueden generar situaciones peligrosas. La multa por esta infracción puede ascender a 200 euros, aunque no conlleve una pérdida de puntos.
Ocupar parcialmente la acera
Aparcar sobre la acera, aunque sea parcialmente, es ilegal. Muchos conductores creen que por dejar el vehículo solo parcialmente subido a la acera evitan sanciones. No obstante, este comportamiento es especialmente vigilado porque afecta directamente a peatones, personas con movilidad reducida y padres con carritos de bebé. Con ello, hay que saber que la multa por estacionar sobre la acera puede variar entre 80 y 200 euros, dependiendo del municipio y del grado de obstrucción que genere el vehículo.
No respetar las distancias mínimas con otros vehículos
A menudo, en zonas con aparcamiento regulado o calles estrechas, los conductores intentan optimizar al máximo el espacio disponible, pegando excesivamente sus coches a los de delante y detrás. Sin embargo, el Reglamento General de Circulación exige que se mantenga una distancia suficiente para facilitar la maniobra de los demás conductores y garantizar la seguridad. La sanción por no respetar estas distancias mínimas puede llegar a los 200 euros.
Aparcar frente a vados permanentes
Otro error frecuente es estacionar el coche frente a la entrada o salida de garajes privados señalizados con un vado permanente. Aunque sea por pocos minutos, este aparcamiento está estrictamente prohibido y los ayuntamientos suelen actuar con rapidez en estos casos. La multa oscila entre 100 y 200 euros, además de la posible retirada del vehículo con grúa municipal, lo que supone además un coste extra.
Estacionar sobre pasos de peatones o ciclistas
Muchos conductores creen que dejar el vehículo estacionado parcialmente sobre un paso de peatones durante unos pocos minutos es un comportamiento permisible. Nada más lejos de la realidad. Esta acción está estrictamente prohibida y considerada muy grave por el riesgo evidente que supone para peatones y ciclistas. La multa en estos casos suele ser de 200 euros, sin perjuicio de la retirada del vehículo si obstaculiza gravemente la circulación.
Aparcar en zonas reservadas a minusválidos sin tarjeta autorizada
Estacionar en plazas reservadas para personas con movilidad reducida sin disponer de la tarjeta acreditativa supone una infracción grave. Aunque pueda parecer evidente, muchos conductores incurren en este error por simple despiste o por considerarlo una infracción menor. Nada más lejos de la realidad, ya que la sanción económica puede alcanzar hasta 200 euros, además de la posible retirada inmediata del vehículo.
Estacionar en zonas de carga y descarga fuera de horario permitido
Muchas ciudades tienen áreas específicas para carga y descarga con horarios concretos. Aparcar en estas zonas fuera de las horas permitidas puede dar lugar a multas significativas. Además, aunque esté permitido durante ciertos horarios, es fundamental asegurarse del periodo exacto de tiempo permitido, ya que suele haber límites estrictos. La multa típica por aparcar fuera del horario autorizado ronda entre los 60 y 200 euros.
En definitiva, aparcar correctamente no es solo una cuestión de respeto hacia los demás usuarios, sino una necesidad para evitar sanciones económicas que pueden resultar sorprendentemente elevadas, e incluso pueden acarrear la retirada del vehículo. Es tarea de los conductores estar debidamente informados de la normativa, y ser consciente de las normas específicas vigentes, si queremos ahorrarnos muchos quebraderos de cabeza y gastos imprevistos.
