Alba y Santi son novios desde hace 7 años. Comparten que decidieron crear contenido para adultos en una reconocida plataforma a raíz del "morbo" que les atraía que los internautas les viesen mantener relaciones sexuales. Sin embargo, cayeron en una brutal estafa por parte de una agencia de representación que les prometió unas ganancias millonarias.

En el pasado mes de octubre facturaron con su material cerca de 3.500 euros. Sin embargo, la empresa con la que habían cerrado un acuerdo les hizo ver algo totalmente diferente. "Nos habían prometido que íbamos a facturar el triple, pero no veíamos pagos mayores de 200 o 100 euros", comparte Alba en 'Código 10', que este martes ha contado con el testimonio de otros creadores de contenido sobre la aceptación en la familia a sus servicios online.

Tras ello, empezaron a surgir más problemas en la relación entre la pareja con la agencia de representación. "Nos dimos cuenta de que nuestro perfil lo habían utilizado para hacer propaganda de otros perfiles", asegura la entrevistada. Así que ya en el mes de febrero decidieron que lo mejor era salir de la organización y manejar ellos mismos sus perfiles en una reconocida plataforma donde suben contenido explícito. "Nosotros decidimos desvincularnos de ellos y trabajar aparte. Lo dejé y me amenazaron con demandarme", dice.

La pareja cuenta que es Alba la que tiene el perfil en la red social y que, por tanto, es ella la que ingresa el dinero. "Creamos vídeos sexuales pero lo único que hace él es grabarlo aunque la plataforma es mía", explica. Tanto ella como su pareja, Santi, tienen claro que apenas prestan atención a las críticas que pueden recibir. "Nos da igual lo que piense la gente, nuestra familia nos apoya", exponen en 'Código 10'.