En este infierno sobre la tierra, buscan con sus propias manos supervivientes entre los cascotes. Y lo que encuentran es un pequeño que ha perdido toda la esperanza. Se recrudecen los bombardeos del régimen sirio en Guta oriental, una zona controlada por los rebeldes a las afueras de Damasco. En las últimas horas, han dejado más de cien muertos, veinte niños entre ellos.