La Justicia italiana mantiene el secuestro de un barco de rescate de una ONG alemana

El 'Iuventa' fue confiscado por orden de los fiscales el pasado mes de agosto en Sicilia bajo la acusación de que la ONG acordaba los rescates de los migrantes en el Mediterráneo con traficantes libios.

Este lunes, el Tribunal de Casación celebró una vista sobre el caso y el fallo confirmando la confiscación del barco se ha anunciado este martes.

Jugend Rettet ("juventud al rescate") ha indicado que está considerando recurrir la decisión ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en Estrasburgo.

"Estamos devastados por el fallo dictado hoy por el tribunal: ¡el IUVENTA no será liberado! Pero lucharemos por el derecho a rescatar a personas en apuros en el mar", ha asegurado la ONG en su Twitter.

Jugend Rettet ha asegurado que se enfrenta a acusaciones absurdas en un momento en el que los guardacostas libios infringen las leyes internacionales "cada día".

La semana pasada, la ONG española Proactiva Open Arms, cuyo barco fue incautado en marzo por razones similares, consiguió que les fuera devuelto tras una sentencia dictada por un juez de instrucción.

Proactiva Open Armas y Jugend Rettet están siendo investigadas por violar las leyes de inmigración italianas. El año pasado ambas organizaciones fueron criticadas en Italia después de que la agencia fronteriza de la Unión Europea, Frontex, y fiscales italianos dijeran que incentivaban la migración ilegal al rescatar a gente cerca de las costas libias.

Italia ha intentado regular las actividades de las ONG con un código de conducta que algunas organizaciones se han negado a ratificar y ha firmado acuerdos con las autoridades libias para frenar las salidas de barcos con migrantes del país africano.

En 2018, esta estrategia ha conseguido reducir las llegadas de migrantes en casi un 80 por ciento interanual. Desde el 1 de enero se han registrado menos de 8.000 llegadas a Italia. Sin embargo, los grupos de Derechos Humanos denuncian que, como consecuencia, tras los rescates marítimos más personas son atrapadas o devueltas a Libia, donde se enfrentan a torturas y abusos.

Proactiva Open Arms se ha solidarizado con la ONG alemana. "Porque rescatar en el mar no es un delito. Todo nuestro apoyo a Jugend Rettet. #FreeIuventa", ha escrito la ONG española en su cuenta de Twitter.

Por su parte, Médicos Sin Fronteras (MSF), que también cuenta con un barco de rescate en el Mediterráneo junto con la ONG SOS Mediterranée, también ha expresado su consternación por el fallo judicial.

"Este veredicto fija un preocupante precedente para el futuro de las operaciones humanitarias en el Mediterráneo y envía una señal inquietante: Europa seguirá criminalizando a las organizaciones humanitarias que están realizando operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo central en lugar de reforzar la capacidad de salvar vidas en el mar", ha denunciado la jefa del departamento de emergencias de MSF, Karline Kleijer.

"Es inaceptable que migrantes, refugiados y solicitantes de asilo sigan ahogándose en el mar con al menos once personas ahogadas solo el pasado fin de semana", ha lamentado, defendiendo que "salvar vidas no es un delito".