Barrio Sésamo, el nuevo enemigo de Donald Trump: quiere recortarle los fondos por representar el 'wokismo'
La mítica serie nunca se ha escondido desde que comenzó a emitirse en 1969
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Epi, Blas y el Monstruo de las Galletas están en el punto de mira de Donald Trump. Para el presidente de Estados Unidos, Barrio Sésamo representa lo peor de lo que él llama el ‘wokismo’. La serie se convierte así en otro objetivo del jefe del Ejecutivo estadounidense y se suma a su larga lista en la que se encuentran, por ejemplo, los aranceles, según informa Sergio García García.
Barrio Sésamo son los nuevos enemigos de Trump por ser “demasiado woke”. El magnate los acusa directamente de promover la formación de los niños en ideas radicales de izquierda. Hasta ahora, todos los gobiernos estadounidenses, republicanos y demócratas, han confiado en la serie de los muñecos.
La serie desoye las críticas de Trump
La mítica serie nunca se ha escondido desde que comenzó a emitirse en 1969. Y a pesar de ser infantil, sus diálogos blancos y divertidos, siempre se han significado por valores como la igualdad y el respeto. Porque más allá de enseñarnos lo que es fuera y dentro o las letras del abecedario, el monstruo de las galletas ha luchado contra la obesidad.
Elmo se ha posicionado contra el racismo y Caponata ha enseñado lo que es una dieta saludable. A pesar de que Donald Trump quiera cortarles los fondos, la serie desoye sus críticas. Con una foto que muestra las manos entrelazadas de sus personajes nos desea a todos un feliz mes de junio. Una imagen que no es casualidad sino el orgullo de pertenecer a esta familia. En su barrio, todo el mundo, dicen, es bienvenido.