Rutte insiste en que España necesitaría al menos un 3,5% para cumplir con sus compromisos
Pedro Sánchez anuncia un acuerdo con la OTAN para no incrementar el gasto militar de España al 5% del PIB
La HayaPedro Sánchez se queda solo en la OTAN. Su negativa a llegar al 5% del gasto militar se evidencia tras posar en la foto de familia en La Haya: él, rezagado y marcando distancia. Parece que ha querido dejar claro ese aislamiento. Según informa Carlota Núñez y Ana García Quesada, Sánchez no ha entrado por la zona en la que estaba la prensa y ha evitado el paseo con decenas de micros preguntando sobre la postura española. Es verdad que no ha sido el único, pero el foco está puesto en él por la posición de España en el acuerdo.
Mientras el resto de líderes charlaban en corrillos y se saludaban, el presidente de España se ha sentado muy rápido en su sitio, evitando cruzarse con Donald Trump. Sánchez reitera el firme compromiso de España con la OTAN pero se mantiene firme con su decisión de no subirlo al 5%.
"España va a seguir siendo un aliado firme y constante", según Sánchez
El jefe del Ejecutivo ha comparecido en la cumbre de la OTAN para asegurar que "hoy gana la OTAN, gana España y gana la seguridad y el Estado de bienestar". El jefe del Ejecutivo ha recalcado que el acuerdo al que han llegado satisface a todos y ha subrayado que "España va a seguir siendo un aliado firme y constante".
Sánchez ha afirmado que no ha tenido un momento para saludar o intercambiar alguna palabra con Trump pero ha aprovechado para decir que si hubiese estado otro presidente de Gobierno aquí, "España habría firmado el 5% del gasto en defensa".
El presidente también ha recalcado que todos los miembros de la alianza están de acuerdo en conseguir unas negociaciones "honestas hacia la paz". Sánchez ha insistido en que España podrá seguir su propia ruta soberana de inversión, a pesar de que el documento final firmado por los líderes recoge el compromiso del 5% en el año 2035.
Sánchez solo intercambia algún gesto amistoso con el presidente turco
Apretón de manos entre Pedro Sánchez y Mark Rutte, secretario general de la OTAN, y sonrisas diplomáticas para la foto inicial. Aunque en la de familia, Sánchez se encargaba de marcar distancia con el resto. En una esquina, ligeramente separado, con rictus serio. Era el último en salir de la sala, pensativo, con las manos en la espalda.
Dentro, más de lo mismo. Nada de corrillos, al contrario que los demás. Él iba directo a su asiento y solo intercambiaba algún gesto amistoso con el presidente turco, Recep Tayyip Erdoğan, sentado a su lado. Sánchez ha sido el protagonista de esta cumbre por negarse a lo que el secretario de la OTAN pedía nada más arrancar.
Eslovaquia y Bélgica, los únicos que apoyan a Sánchez
El compromiso del 5% de gasto en defensa, que exige Donald Trump, se suman todos los grandes europeos, incluidos Alemania, Francia y hasta Italia. Sánchez tomaba nota, pero el Gobierno tiene claro su límite. Y aunque Rutte insiste en que España necesitaría al menos un 3,5 % para cumplir con sus compromisos, Sánchez no se baja del carro.
Al presidente del Gobierno solo le apoyan Eslovaquia y Bélgica. "Si Pedro Sánchez cree que puede cumplir con la OTAN, con un 2,1% del PIB es un genio y la genialidad me inspira", asegura Bart de Wever, primer ministro de Bélgica. El jefe del Ejecutivo cree que puede cumplir con la OTAN con un 2,1% del PIB en lugar de un 3,5%. Pero a Trump esto le irrita y hoy se han mantenido distanciados. “A trabajar”, ha dicho el país anfitrión antes de que Rutte haya echado a la prensa para empezar la reunión sin espectadores.