El Gobierno aprueba un gasto extra en Defensa de 1.129 millones de euros sin contar con sus socios

  • Pedro Sánchez se reunió por primera vez con la industria militar el 18 de marzo

  • El jefe del Ejecutivo lleva insistiendo en el aumento del gasto militar desde hace tiempo

  • El Gobierno ha aprobado este gasto en el Consejo de Ministros para evitar pasar por el Congreso

El Gobierno ha aprobado un gasto extra de 1.129 millones de euros para reforzar las capacidades militares de las Fuerzas Armadas. Una medida que han llevado con sigilo, ya que no lo contaron en la rueda de prensa posterior. Las diferencias con sus socios podrían estar detrás de este silencio: Sumar le exigió a Pedro Sánchez que suspendiese su compromiso con la OTAN.

“Invertir en paz es invertir en Defensa”, así lo dijo la ministra Margarita Robles para dejar clara la postura del partido, pese a su escueta explicación que han facilitado tras su aprobación. El Gobierno ha justificado el gasto en cuatro párrafos sin hacer un desglose del material comprado.

¿Qué alega el Gobierno para aprobar el gasto extra en Defensa?

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunió por primera vez con la industria militar el 18 de marzo. El jefe del Ejecutivo lleva insistiendo en el aumento del gasto militar desde hace tiempo. “Hay que estar cerca de ese 2% del Producto Interior Bruto”, declaró en una ocasión para subrayar la importancia de cumplir con el compromiso adquirido con la OTAN. Es un objetivo que esperan cumplir en 2029 porque España está a la cola del gasto de los socios de la Alianza Atlántica.

El Gobierno alega la inestabilidad e incertidumbre internacional como justificación de la compra de materiales. Un argumento que sus socios no apoyan. El portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, le pidió a Sánchez que no se sumase a “la insensata carrera armamentística”. Bildu, Podemos, ERC o BNG, sus socios habituales en el Congreso, tampoco comparten la opinión de Sánchez. Esta tensa situación explicaría por qué el Gobierno ha aprobado este gasto en el Consejo de Ministros para evitar pasar por el Congreso y sortear el veto, una fórmula que ya han utilizado en otras ocasiones.