Declaración de la Renta 2025: Hacienda puede multarte si no declaras el alquiler
Declarar el alquiler es una obligación que tienen tanto el propietario como los inquilinos de una vivienda habitual
No hacerlo puede conllevar multas que dependen de la cantidad no declarada y de si Hacienda detecta que hay ocultación o intento de fraude
Declaración Renta 2025: ¿Cómo desgravarte el alquiler si eres inquilino?
Estos últimos años, la Agencia Tributaria ha intensificado su vigilancia sobre los ingresos que proceden del alquiler de inmuebles. Si se omite esta información puede acarrear que se impongan sanciones significativas por parte de Hacienda.
La declaración del alquiler de una vivienda en la renta es una obligación que tienen tanto los propietarios como los inquilinos. La Agencia Tributaria dispone de herramientas para detectar cuando se producen estas omisiones en los ingresos derivados del arrendamiento y la falta de declaración puede conllevar sanciones económicas muy importantes. Asimismo, se tiene que tener en cuenta que existen deducciones fiscales que pueden beneficiar a quienes cumplen con esta normativa e influyen mucho en si sale a devolver o a pagar la Declaración de la Renta.
MÁS
Cuáles son las obligaciones fiscales de los propietarios y de los inquilinos
Los propietarios que tengan viviendas en alquiler deben incluir los ingresos que se obtienen en su declaración de la renta dentro del apartado de rendimientos del capital inmobiliario. La Agencia Tributaria sostiene que, “tienen la consideración de rendimientos del arrendamiento (...) cuya titularidad corresponda al contribuyente y no se hallen afectos a actividades económicas realizadas por el mismo”.
No obstante, se pueden aplicar deducciones, como el 60% sobre el rendimiento neto si el inmueble está destinado a vivienda habitual, con un detalle: el contrato debe haber sido firmado antes del 1 de enero de 2024. Los contratos de arrendamiento que hayan sido firmados posteriormente, tendrán una deducción del 50%, aunque en determinados casos puede alcanzar el 90% si se trata de zonas tensionadas o cuando el inquilino tiene entre 18 y 35 años.
Además, los propietarios también pueden desgravarse gastos como son aquellos que están relacionados con la formalización del contrato, las reparaciones que la vivienda precise para la habitabilidad y la sustitución de mobiliario o electrodomésticos. De esto se puede deducir hasta un 10% de su valor en el IRPF. También pueden incluir los intereses de la financiación, en el caso de haber comprado el mobiliario a crédito.
Por otro lado, los inquilinos también deben declarar el importe del alquiler en la renta para poder acceder a las deducciones autonómicas, siempre y cuando se cumplan con dos requisitos que exige la Agencia Tributaria:
- Se ha firmado el contrato de arrendamiento antes del 1 de enero de 2015 y se ha pagado, antes de esa fecha, montos por el arrendamiento de la vivienda habitual.
- Se ha tenido derecho a la deducción por alquiler de la vivienda habitual correspondiente a los pagos realizados por el arrendamiento de dicha propiedad en un ejercicio fiscal anterior al 1 de enero de 2015.
En caso de encontrarse en cualquiera de estos casos, se puede seguir deduciendo un 10.05% del alquiler en la declaración, siempre que la base imponible no supere los 24.107,20 euros y sin afectar las deducciones autonómicas aplicables.
Cuáles son las multas por no declarar el alquiler
La Agencia Tributaria clasifica las infracciones relacionadas con la omisión de ingresos por alquiler en tres categorías principales, éstas se basan en la cantidad no declarada y en si existe o no ocultación o fraude:
- Infracción leve: se considera leve cuando el importe no declarado es igual o inferior a 3.000 euros y no existe ocultación. En estos casos, la sanción corresponde al 50% de la cantidad no declarada.
- Infracción grave: se considera grave cuando la cantidad no declarada supera los 3.000 euros y existe ocultación. La sanción en este caso oscila entre el 50% y el 100% del importe no declarado.
- Infracción muy grave: se considera muy grave cuando se emplean medios fraudulentos para ocultar los ingresos por alquiler. En estos casos, la sanción puede variar entre el 100% y el 150% de la cantidad no declarada.
Además de las sanciones económicas que se apliquen, no declarar los ingresos por alquiler puede conllevar la pérdida de beneficios fiscales. Tradicionalmente, los propietarios que tienen un inmueble en alquiler y éste es utilizado como vivienda habitual, se podía aplicar una reducción del 60% sobre el rendimiento neto obtenido. Sin embargo, para los contratos firmados después de mayo de 2023, la reducción se modificó al 50%. Si Hacienda detecta que no se han declarado los ingresos por alquiler, el propietario perdería el derecho a aplicar esta reducción, lo que significa que su carga fiscal aumentaría.
Qué mecanismos utiliza la Agencia Tributaria para detectarlo
La Agencia Tributaria dispone de diferentes métodos para identificar ingresos por alquiler no declarados:
- Cruce de información: Hacienda compara los datos proporcionados por los inquilinos en sus declaraciones de la renta con la información que es declarada por los propietarios. Si un inquilino declara haber pagado un alquiler y el propietario no lo hace, se genera una discrepancia que puede dar lugar a una inspección.
- Control de suministros: Se supervisan los contratos de suministros para detectar cualquier cambio en la titularidad o consumos que indiquen la existencia de un alquiler no declarado.
- Movimientos bancarios: La Agencia Tributaria puede analizar las transacciones bancarias en busca de ingresos recurrentes que pueda sugerir que son pagos de alquiler.
- Denuncias y colaboración ciudadana: Las denuncias anónimas o la información proporcionada por terceros también puede desencadenar una investigación sobre alquileres no declarados.