Los Veintisiete aprueban el primer esbozo de la "estrategia 2020"

Zapatero ha asegurado que la "idea esencial" que sustenta las conclusiones aprobadas por los 27 países sobre la denominada estrategia 2020 es "la coordinación, la unión para una política económica coordinada, la unión para una gobernanza económica de los 27". "Esto es un salto trascendental", ha asegurado en rueda de prensa junto con el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, y el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.

El presidente del gobierno ha recalcado que hay que afrontar los principales problemas de la Unión en su economía y mejorar su potencial crecimiento, y que los objetivos tienen que ser concretos: la educación, la investigación, la innovación y la lucha contra el cambio climático. Además, ha apoyado la propuesta del ex presidente del Gobierno, Felipe González, que dirige el grupo de sabios sobre el futuro de la UE, de que el Consejo Europeo asuma "más liderazgo en los temas de política económica".

También ha considerado positivo el acuerdo alcanzado por los líderes europeos para elaborar una posición común de cara a la próxima cumbre del G-20 que se celebrará en junio en Toronto,y que será redactada por él mismo y por Van Rompuy.

Desacuerdos en educación y pobreza

Por su parte, el Presidente del Consejo Europeo ha asegurado que los cinco objetivos que centrarán la nueva estrategia económica de la UE son "un resumen del modelo europeo que hemos heredado y que queremos reforzar". "Una economía social de mercado con una gran corrección ecológica", ha explicado.

Por su parte, el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, ha explicado que los 27 seguirán trabajando de aquí a junio para concretar los objetivos de educación y pobreza. Además, ha recordado que ahora corresponde también a los Estados miembros convertir los objetivos europeos en metas nacionales adaptándolos a sus especificidades.

Van Rompuy ha explicado que la falta de acuerdo sobre el indicador de la pobreza se debe a que algunos países piensan que esta cuestión es competencia nacional y no de la UE, otros cuestionan los sistemas de medida y otros creen que no es necesario porque con el aumento de la tasa de empleo, que es el primer objetivo de la nueva estrategia, ya se logra el objetivo de luchar contra la pobreza.