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Rosi quiere a una persona para tener una relación “yo no quiero a un hombre para un día”. Nada más llegar a ‘First Dates’ Le ha pedido a Matías una caipiriña “soy de Brasil” y les ha contado que llevaba ya bastantes años en España. Cuando Carlos Sobera le ha preguntado por su hombre ideal, ella le ha confesado que lleva más de tres años sola y que le gustan los negros. El presentador ha querido saber si era por algo especial y la soltera se lo ha dicho moviendo las manos.
No se refería a “las alas” como ha bromeado Matías, sino al tamaño de su miembro viril como bien ha entendido Sobera “te lo digo por experiencia, es mentira que el tamaño no importa”. El presentador ha querido saber si había mucha diferencia con los hombres blancos y Rosi le ha dicho que sí, que ella había estado muchos años casada con un japonés y que era una gran diferencia. El presentador lo ha entendido “entre África y Asia, sí, pero con los españoles, ¿también?”, algo que Rosi le ha respondido “no se pueden comparar con un africano, lo siento”.
Keny, su cita, se ha centrado en ser jugador de fútbol profesional y ha dejado un poco de lado el amor. Al verle, el rostro de Rosi se ha iluminado y le ha confesado a Carlos Sobera que era su prototipo “es muy guapo, tiene una bonita sonrisa, unos bonitos dientes”. Keny le ha contado que era de Guinea Ecuatorial y que llevaba dos años solo en España. El soltero se ha fijado mucho en los pechos de Rosi y aunque ha intentado disimular, le ha parecido complicado que no se notara.
Mientras decidían que iban a cenar, Keny le ha dicho que era muy especialito para la comida y ella le ha dicho que a sus hijos les gustaba mucho el picante. Él le ha preguntado por la edad de sus hijos, pero no le ha preocupado porque él se lleva muy bien con la gente joven. Sin embargo, cuando Rosi se ha interesado por dónde vivía su cita, ha tenido claro que no era el hombre que estaba buscando “no quiero una relación a distancia”. Él ha sentido que no había mucha distancia entre Valencia y Madrid, pero ella ha visto “demasiada”.
Keny puede cambiar de ciudad sin problema porque se dedica al fútbol sala y se está preparando para ser representante. Jugando al Rasca del Amor, los solteros han hablado de sexo y Keny le ha confesado que su talento sexual estaba en la lengua “cuando bajas en el submarino, empiezas por los bordes y vas buscando el movimiento de las piernas”. Ella le ha dicho que su talento residía en el baile “tengo unas buenas piernas”.
Rosi ha querido saber cuál era el tamaño de Keny y se lo ha preguntado muy sutilmente “yo tengo hijos y necesito un coche grande, ¿tienes un coche grande?”. Keny lo ha pillado rápidamente y le ha respondido contundente “tengo un coche grande”. El soltero asegura tener un coche modesto, pero con una carrocería negra y una leyenda que siempre ayudan “he estado en un vestuario de negros en Guinea y uno de japoneses en Japón, y las dos leyendas son ciertas”.
La soltera está buscando a alguien para tener algo serio y aunque Keny no suele hacerlo, ha venido a ‘First Dates’ a ver si también lo podía encontrar. Rosi echa de menos el sexo, pero Keny ha tenido la sensación de que lo que necesitaba era conexión “si hay complicidad, en el sexo conmigo, se hartaría”.
En el reservado, Rosi le ha demostrado a Keny que el reggaetón se baila con el culo y ha calentado el ambiente diciéndole que quería probar su coche sabiendo que era un coche grande. Sin embargo, a la hora del beso, le ha dado lo que él ha considerado un “besiqui”, más que un beso sexy.
Los dos han tenido claro que querían volver a verse y que ella tenía que probar su coche de gran tamaño. Keny ha aceptado encantado a que se subiera en su coche porque está convencido de que un coche de carrocería negra nunca defrauda y ella también “son de primeras calidades”.