Según ha informado el cuerpo, el hombre se ganaba la confianza de las personas estafadas haciéndose pasar por un agente de Policía, para lo cual portaba un uniforme simulado, una placa del CNI e incluso una pistola detonadora.
Según denuncias interpuestas, el hombre ofrecía a sus víctimas cursos y trabajos relacionados con hostelería previo pago de una cuota de 150 euros. Se estima que, en total, se hizo con unos 2.000 euros.
La Guardia Civil lo investiga por la comisión de nueve delitos perpetrados en las localidades de Boiro y Ordes desde el 12 de julio, aunque todavía se desconoce si hay más afectados.
En el momento de la detención, el hombre portaba dentro de una mochila una caja con munición, una pistola detonadora, una camiseta con el logotipo de la Policía Nacional y una placa policial simulada.
REMOLQUE DE UNA EMBARCACIÓN
Por otra parte, agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil de A Coruña intervinieron en una operación de remolque en el mar, tras tener conocimiento a través de Salvamento Marítimo de que una embarcación de recreo traía con dificultades a remolque a una embarcación semirrígida que, con dos personas a bordo, había volcado en las cercanías de Cabo Prioriño.
Pasadas las 17,00 horas, los agentes llegaron a su encuentro y procedieron a darle remolque hasta aguas del puerto exterior de Ferrol, donde se logró girar y poner a flote. A continuación, siguió hasta el muelle de Curuxeiras.
La embarcación auxiliada iba patroneada por su propietario, de 31 años, y tenía como ocupante a otro hombre de 58 años, ambos vecinos de Narón y que resultaron ilesos.