Wiska se vio obligada a volar con sus hijos a la República Checa en 2010 tras los cargos que se le imputaban, según publicó el portal International Business Times.
La mujer de 26 años, con tres hijos, tras un largo proceso burocrático, ha recibido la negativa de concederle asilo y han emitido una orden de expulsión de la República Checa.
"Me han dado 15 días para abandonar el país. A ellos ( las autoridades checas] no les importa que no podamos volver a Ucrania", dijo la actriz porno a los medios. Además aseguró que apelaría a los tribunales europeos.
La pornografía fue prohibida en Ucrania por el ex presidente de Ucrania, Victor Yushchenko en 2009. Las personas declaradas culpables de posesión, venta o difusión de pornografía pueden enfrentar una condena de hasta tres años de prisión.
La investigación de las autoridades ucranianas contra Wiska se abrió a raíz de una denuncia presentada por un diputado local, inquieto por la popularidad de la actriz porno frecuentemente entrevistada en programas de televisión.
La policía registró su casa y encontró material pornográfico en el ordenador de su marido. El hombre dijo que era para uso privado, mientras que Wiska alegó que nunca había rodado una película en Ucrania.
La actriz porno es apoyada en Ucrania por el grupo feminista FEMEN que se ha concentrado frente a la sede del Gobierno en varias ocasiones para mostrar su respaldo a la mujer.