Una ex agente de la CIA abre un crowfunding para comprar Twitter y echar a Trump

Noticias Cuatro 26/08/2017 08:30

Wilson lanzó la recogida de fondos la semana pasada con un tuit en el que decía “si los ejecutivos de @Twitter no van a apagar la violencia y el odio de Trump, entonces nos corresponde a nosotros. #BuyTwitter (Compra Twitter) #BanTrump (Prohíbe a Trump)”.

En la página de GoFundMe en la que recoge esta campaña, explica que los tuits de Trump “dañan al país y ponen a la gente en peligro”.

"Las malas noticias son que Twitter ha ignorado los crecientes avisos para mejorar los estándares de su propia comunidad y eliminar la cuenta de Trump. Las buenas, que podemos tomar esa decisión por ellos", añade.

Wilson tiene intención de recaudar 1 billón de dólares (1.000 millones de euros), pero lleva recaudado poco más de 6.000 dólares (unos 5.000 euros).

En una declaración por correo electrónico, la secretaria de prensa de la Casa Blanca Sarah Huckabee Sanders ha dicho que el bajo total muestra que al pueblo estadounidense le gusta el uso que hace el presidente republicano de Twitter.

"Su ridículo intento de cerrar su primera enmienda es la única violación clara y expresión de odio e intolerancia en esta ecuación", indica el comunicado.

Wilson escribió en la página GoFundMe que espera recaudar suficiente dinero para comprar una participación de acciones de Twitter que le permitan tener control sobre la empresa. Si no tiene suficiente para comprar una mayoría de acciones, dijo, explorará opciones para comprar "una participación significativa" y defenderá su propuesta en la reunión anual de accionistas de Twitter.

"Y si eso no fuera posible, el 100% de las ganancias será donado a Global Zero, una organización sin ánimo de lucro pionera en la resistencia a la guerra nuclear", ha indicado Wilson.

Twitter no ha querido realizar comentarios al respecto, pero su cofundador Jack Dorsey ya explicó hace unos meses que los tuits de Trump que sugieren acciones violentas contra los periodistas no rompen las normas de su plataforma.

Valerie Plame Wilson trabajó como agente encubierta de la CIA desde 1985 hasta 2005. Tuvo que dejar el cargo después de que en 2003 el periodista Robert Novak revelara su identidad en un editorial para el periódico Washington Post.

Días antes de la revelación, su marido, Joseph Wilson, un exdiplomático, había denunciado manipulaciones en el seno del gobierno de George W. Bush para justificar la invasión de Irak.

Wilson viajó a Níger en 2002 para comprobar en primera persona la supuesta conexión entre la industria local del uranio y Saddam Hussein. Al regresar de su viaje, escribió una columna en el New York Times donde afirmaba que el país africano no vendió uranio a Irak.

La filtración, que además provocó la caída y condena de Lewis Libby, mano derecha del vicepresidente Dick Cheney, por obstrucción a la Justicia, se conoció como’Plamegate’. Incluso se hizo una película en 2010 basada en el caso, ‘Fair Game’, con Naomi Watts y Sean Penn como protagonistas.