"Estoy profundamente preocupada por los recientes ataques en Bangassou, Bria y Alindao. La actual situación parece extremadamente precaria, con informes de violencia y denuncias de graves crímenes contra civiles y trabajadores humanitarios que podrían caer en la jurisdicción del TPI y deben parar inmediatamente", ha dicho a través de un comunicado.
Bensouda ha urgido a todas las partes en conflicto, "incluidas las que parecen estar vinculadas a (las milicias cristianas) antibalaka y a (antiguos miembros de la alianza musulmana) Seleka", a desistir y ha recordado que el TPI "está preparado para ayudar a las autoridades centroafricanas, que tienen la obligación de investigar estos crímenes y procesar a sus responsables".
"Mi oficina sigue vigilando muy de cerca estos acontecimientos para valorar si son necesarias más acciones", ha subrayado, recordando que ya investiga los crímenes cometidos en República Centroafricana desde 2012. "No dudaré en emprender más acciones si estos últimos crímenes caen en la jurisdicción del TPI, así como en tomar todas las medidas necesarias para que los autores rindan cuentas", ha añadido.