El Papa quiere que la no-violencia acabe con la III Guerra Mundial por partes que se libra en el mundo

EUROPA PRESS 26/08/2016 17:17

El Pontífice señala que la violencia y la paz son dos maneras "opuestas" de construir la sociedad y destaca que la proliferación de brotes de violencia da origen a "gravísimas y negativas consecuencias sociales". Además, exhortará a los políticos a moverse en los espacios de lo que es "posible, negociando vías de paz, incluso ahí donde los caminos parecen ambiguos e impracticables".

"De esta manera, la no-violencia podrá adquirir un significado más amplio y nuevo: no solo como aspiración, deseo, rechazo moral de la violencia, de las barreras, de los impulsos destructivos, sino como enfoque político realista, abierto a la esperanza", manifiesta en el mensaje.

Sin embargo, en su mensaje advierte de que esto no significa que "una nación pueda permanecer indiferente hacia las tragedias de otra" sino que se refiere a "reconocer el primado de la diplomacia sobre el fragor de las armas".

"Se trata de un método político fundado en la primacía de la ley. Si se salvaguardan los derechos de cada persona y la igual dignidad de cada uno sin discriminación ni distinción, la no- violencia, entendida como método político, puede constituir una vía realista y llena de esperanza para superar los conflictos armados. En esta perspectiva, es importante que siempre se reconozca la fuerza del derecho, en vez, del derecho de la fuerza", añade.

Asimismo, arremete contra el comercio mundial de armas, que cataloga de "tal magnitud que, en general, es subestimado". "El tráfico ilícito de las armas con frecuencia sostiene la mayor parte de los conflictos en el mundo. Y la no-violencia como una táctica política puede hacer mucho para combatir este flagelo", concluye.

Será cuarta Jornada Mundial de la Paz de su Pontificado, una celebración que fue instituida por el Papa Pablo VI y se celebra cada año el primero de enero.