La Reina Isabel II recorre la impresionante cámara acorazada del Banco de Inglaterra entre interminables estanterías repletas de lingotes de oro.Y aquí, entre millones de libras de un valor que aumenta a diario surge la gran pregunta...¿porqué nadie predijo la crisis?, dice la Reina..."supongo que en términos monetarios era era difícil predecir , añade ...pero ¿no ha sido la gente un poco laxa?... "autocomplaciente", más bien le responde un empleado.La Reina de Inglaterra escucha entonces las tres razones del porqué nadie predijo la crisis, según un experto financiero del banco. Primero porque como la crisis como un terremoto es un evento excepcional, difícil de anticipar. Segundo porque los mercados eran eficientes y no era necesaria una regulación. Y tercero porque había estabilidad y la gente no era consciente de cómo estaba interconectado el sistema. Y con esta explicación al Reina regresó a palacio.