Argelia confirma 37 rehenes muertos de ocho nacionalidades y cinco desaparecidos

Noticias Cuatro/Agencias 21/01/2013 17:04

El registro del complejo ha propiciado hasta el momento el hallazgo de 25 cadáveres, que se sumarían a los 23 fallecidos en el asalto del sábado, según esta versión.

Además, las autoridades han informado de la muerte de 32 milicianos en la operación militar para recuperar el control de las instalaciones, con lo que serían ya al menos 80 los muertos.

Sin embargo, la operación de registro de las instalaciones continúa activa, por lo que la cifra final de fallecidos podría incrementarse, según la fuente consultada.

Aproximadamente una treintena de extranjeros continúan desaparecidos después de la toma del complejo entre estadounidenses, británicos, franceses, japoneses, noruegos y rumanos.

Por el momento Reino Unido ha confirmado tres muertos, mientras que también hay constancia de la muerte de dos rumanos y un estadounidense por parte de sus respectivos gobiernos. La fuente ha asegurado que también hay un francés entre los muertos.

También hay confusión con respecto al número de terroristas muertos que ocupaban la planta.

Las autoridades argelinas han informado de la muerte de 32 milicianos en el asalto del sábado, aaunque otras fuentes han revelado que al menos seis de ellos han sido capturados con vida.

El primer ministro argelino, Abdelmalek Sellal, ha confirmado este lunes que 37 rehenes de ocho nacionalidades perdieron la vida en el secuestro de la semana pasada en una planta de gas en el este del país y ha precisado que todavía hay cinco extranjeros desaparecidos.

Según Sellal, los terroristas procedían del norte de Malí, aunque entraron en Argelia desde Libia, y tenían preparado el ataque contra la planta de gas de In Amenas desde hace dos meses. En total, ha precisado en rueda de prensa recogida por 'Tout sur l'Algérie', el comando lo integraban 32 personas, 29 de las cuales fueron abatidos por el Ejército en los asaltos y otros tres fueron capturados con vida.

Los miembros del comando eran de ocho nacionalidades --argelina, tunecina, egipcia, maliense, nigeriana, canadiense y mauritana-- y estaban comandados por el argelino Bencheneb Amine, mientras que un canadiense coordinaba el ataque. Además, había otro canadiense entre los 32 secuestradores, así como once tunecinos y un nigeriano que trabajó como conductor en la base y que conocía bien la zona. Los secuestradores iban fuertemente armados.

En total, según el primer ministro, había 790 trabajadores en el campamento y la planta de gas de Tiguentourine, que operan de forma conjunta Sonatrach, BP y Statoil, en el momento del ataque inicial el miércoles pasado. De ellos, 134 eran extranjeros de un total de 26 nacionalidades.

Según ha explicado, entre los 37 fallecidos solo figura un argelino, un guardia de seguridad que murió en el ataque inicial, mientras que el resto eran rehenes extranjeros, algunos de los cuales fueron ejecutados de un disparo en la cabeza. Sellal ha precisado que aún hay siete fallecidos sin identificar.

Los secuestradores, ha afirmado, querían hacer explotar las instalaciones de gas, si bien inicialmente su intención fue la de secuestrar el autobús en el que algunos de los trabajadores se dirigían al aeropuerto de In Amenas, situado a unos 40 kilómetros. Asimismo, ha denunciado que los secuestradores colocaron explosivos a los rehenes.

En otro orden de cosas, el primer ministro ha asegurado que Argelia "no enviará ningún soldado a Malí" y que Argel "anima el diálogo entre las distintas partes para encontrar una solución a la crisis maliense". Los secuestradores habían criticado que el Gobierno argelino hubiera autorizado a Francia a sobrevolar su territorio en el marco de su operación militar en Malí.

"Argelia trabaja para proteger sus fronteras y su territorio", ha afirmado Sellal, que ha subrayado que su país "necesitaría dos OTAN para poder vigilar nuestras fronteras".

En unas declaraciones previas, el Gobierno de Argelia ha reivindicado su acción tras asegurar que de no intervenir el resultado hubiera sido peor, según publicó EuroNews.

Además ha publicado el armamento que se ha incautado a los terroristas, que al parecer procedía en su mayor parte, del arsenal libio de Gadafi.

El Ministerio del Interior argelino ha argumentado que el asalto militar a la planta permitió liberar a 685 empleados argelinos y 107 extranjeros.