Todo un ejemplo de gesto solidario. Eso es lo que tuvo Vincent Butterfield, un niño estadounidense de 7 años. El pequeño sorprendió a su mejor amigo, Zac Gossage, un compañero de clase que padece cáncer, yendo a su escuela en Misuri, Estado Unidos, con la cabeza rapada. "Me lo corté para que Zac no sintiera que era el único que no tenía pelo", ha dicho Vincent. Tanto sus maestros, familiares y amigos se sintieron muy orgullosos por este pequeño gran gesto de un niño de siete años de edad.