La mujer hallada en Gádor fue víctima de un crimen machista, cuyo autor ya ha sido detenido

Noticias Cuatro/Agencias 11/10/2018 12:26

Un tuit publicado por la Subdelegación del Gobierno de Almería ha confirmado que la muerte de una mujer, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en un vertedero de Gádor, ha sido un nuevo caso de violencia machista: "El cadáver hallado en el vertedero de Gádor corresponde a la tercera víctima de la violencia machista en Almería en lo que va de año (2 mujeres y 1 niño). Así se confirma tras la investigación y resolución del caso por parte de la @gcalmeriaopc . Nuestra más firme repulsa y condena".

El comunicado llega después de que la Guardia Civil haya detenido en la terminal 4 del aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid al presunto autor del delito cuanto este trataba de huir a su país natal. El detenido, identificado como K.K., es un mauritano de 30 años de edad que fue pareja de la víctima y quien denunció la desaparición de la mujer días antes de descubrir su cuerpo.

El Juzgado de Instrucción número 4 de los de Almería lo acusa de delitos de homicidio doloso y denuncias falsas y ha decretado para K.K. su ingreso en prisión comunicada y sin fianza, según informa Europa Press.

Los investigadores del caso comenzaron a sospechas del detenido desde que recibieron su llamada denunciando la desaparición de su pareja y alegando que podía estar en Murcia con otra persona.

Tras la pertinente investigación, las autoridades descubrieron que K.K. no solo mantenía una relación con la víctima, sino que también era su proxeneta. Ese detalle no pasó inadvertido para los agentes, que comenzaron a seguir muy de cerca al sospechoso.

Fue así como descubrieron que había cedido su coche, con el que se cree que pudo trasladar el cadáver de su pareja, a un amigo de la localidad de Abla.

Además, K.K. se habría desplazado en fechas muy recientes a Madrid con el objeto de obtener un "salvoconducto" de la Embajada de Mauritania para permanecer en Marruecos, así como que había obtenido un billete de avión para viajar, de modo inmediato, a su país natal, previa escala en el Reino Alauita, afianzando la idea de que el mismo, además de deshacerse de su vehículo para ocultar pruebas y evidencias, habría trazado un plan de huida de España "al verse sin duda acosado por los agentes".

Posteriormente, detectaron una llamada del arrestado cuando este trataba de coger un avión con destino a Casablanca. Tras la detención, el acusado se negó a dar la dirección real de su domicilio, valiéndose para ello de que llevaba viviendo en el mismo apenas dos meses. Ésto unido al férreo control al que sometía a la mujer fallecida, provocó que ni siquiera los propios familiares de ésta supieran donde vivía, dificultando su ubicación.

Pese a ello, consiguieron localizar la dirección en Roquetas de Mar y durante su registro obtuvieron evidencias, que junto a las ya recopiladas, implicaban a K.K. con el homicidio.