En una nota, el sindicato señala que utilizar la colaboración con agencias de colocación como criterio para la distribución de los fondos públicos podría derivar en un "auténtico negocio" para algunos, práctica que va "en contra de lo público".
En todo caso, CC.OO. aclara que no está en contra de la colaboración público-privada, dado que ésta "puede ser positiva, siempre que no suponga un recorte de los servicios públicos y su asfixia, para financiar a las entidades privadas". Además, ve "imprescindible" que se controle y evalúe periódicamente su funcionamiento.
Para CC.OO., los servicios públicos de empleo son fundamentales para ayudar a las personas que están en situación de desempleo a encontrar un puesto de trabajo, y para ello ve precioso aumentar los recursos y el presupuesto destinado a los servicios públicos de empleo y para la puesta en marcha de políticas activas de empleo.
A este respecto critica que es lo contrario que se viene haciendo en los últimos años de forma "intencionada e irresponsable" por parte de los gobiernos "conservadores".