Fernández, que ha agradecido el "apoyo, los afectos y cariños" que ha recibido tanto en la CEOE como en la patronal madrileña, ha insistido, en declaraciones a RNE, en que se va a tomar un periodo de "reflexión" sobre su permanencia en dichos cargos institucionales y, según "vaya viendo las cosas", tomará la decisión "más oportuna para todos".
No obstante, ha señalado que aún no ha tenido tiempo de reflexionar y que esperará al fin de semana para hacerlo. "Esta noche no me ha dado tiempo a reflexionar, porque estoy tan cansado, que he tenido muy poco tiempo de reflexionar, voy a ver si tengo tiempo el fin de semana, que lo veo difícil", añadió.
Preguntado expresamente por si descarta dimitir, Fernández ha contestado "que nunca se descarta nada en la vida", y ha añadido que siempre ha tratado de que su conducta fuera "la más apropiada" para lo que representa y para sus 2.000 trabajadores, "que están muy preocupados" por estas noticias.
"Debo preservar los puestos de trabajo, que es lo que tengo que hacer, y preservar el buen nombre de CEIM, de la Cámara de Comercio (de Madrid) y de la CEOE", indicó Fernández, tras insistir en que espera que la Fiscalía Anticorrupción, que ha iniciado una investigación al respecto, encuentre "todo correctamente".
"Cuando empiece la Fiscalía a ver, suponemos que todo estará correctamente, eso espero", indicó Fernández, tras asegurar que él intenta actuar siempre "correctamente".
El presidente de la patronal madrileña, que ha dicho entender que haya empresarios, como el presidente de Confebask, que le hayan pedido que dé un paso atrás, afirmó que se siente "apoyado" por los empresarios españoles y afirmó que no cree que las denuncias que se han realizado sus empresas tengan que ver con alguna conspiración.
"No creo en conspiraciones, creo que el país está convulso en dimisiones, conspiraciones, todos contra todos, estamos viviendo un momento realmente difícil, muy complicado, en vez de estar pensando que tenemos 6 millones de parados y que los jóvenes tengan empleo", subrayó.
Acerca de la posibilidad de que el presidente de CEOE, Juan Rosell, haya pensado en José Antonio Segurado para sustituirle al frente de CEIM, Fernández afirmó que se trata de un "rumor infundado y absurdo".
"Ni lo tengo pensado yo, que es quien lo tiene que pensar, ni el señor Rosell se ha metido en eso, ni tiene ninguna base", apuntó Fernández, quien indicó que Segurado, presidente de honor de la patronal madrileña, le está ayudando en todo.
El vicepresidente de la patronal, que dijo desconocer a los empleados y exempleados que han realizado las acusaciones de pagos en 'negro', afirmó que los aplazamientos de pago que sus empresas tienen con la Seguridad Social o con Hacienda son habituales en un momento de crisis como el actual.
"No me siento mal porque tenga que pedir aplazamientos de pagos, lo hago yo y miles de empresarios españoles que están tratando de sobrevivir y de mantener sus puestos de trabajo", reiteró Fernández, que negó que tuviera muchos concursos con las administraciones públicas. Así, dijo que de los más de 90 establecimientos que gestiona, únicamente cinco son públicos.
Por último, afirmó que "nunca" ha tenido una denuncia en ninguna de sus empresas y que sus trabajadores están "muy contentos" de trabajar con él porque es una persona "muy cercana" con sus empleados.