El CCCB se conjura contra el cambio climático en una gran exposición "teatral" con 8 artistas

EUROPA PRESS 24/10/2017 15:22

El Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB) se conjura contra el cambio climático en una gran exposición inmersiva equiparable a una "experiencica teatral" que explora los rastros de esta crisis a través de ocho artistas y decenas de acciones, así como un manifiesto del filósofo Timothy Morton, que ejerce de Ministro del Futuro en la muestra.

Lo han explicado el director del CCCB, Vicenç Villatoro; la jefa de Exposiciones del CCCB, Rosa Ferré; los comisarios José Luis de Vicente y Josep Perelló, en la presentación de la muestra con colaboraciones internacionales y locales 'Después del fin del mundo', que se podrá visitar hasta el 29 de abril de 2018.

"Se parece muy poco a una exposición, es una experiencia teatral, que apela mucho a las emociones. No queríamos bombardear con datos sobre los centímetros que puede aumentar el nivel del mar", ha resumido De Vicente, quien ya fue comisario de la exitosa 'Big Bang Data'.

El comisario ha definido el recorrido, que no explora las causas de la crisis climática, como un "viaje con tintes de ciencia ficción, salvo que todo lo que se cuenta es estrictamente cierto", ha defendido uno de los ideólogos de la muestra, que ha dicho que las coincidencias con la ciencia ficción son respecto a la forma narrativa.

Parte del Acuerdo de París de 2015, tiene voluntad ensayística y pide "abandonar el antropocentrismo de forma radical", de la mano del escritor de ciencia ficción estadounidense Kim Stanley Robinson, el estudio Unknown Fields Division, los grupos Rimini Protokoll y Superflux y los artistas Benjamin Grant, Charles Lim,Tomás Saraceno y Natalie Jeremijenko.

"La exposición funciona como si alguien entra en una consulta y recibe una mala noticia: ha cambiado todo irreversiblemente, pero de entrada la persona se siente igual", ha observado el comisario.

El comisario ha evidenciado que "los ciudadanos del 2100, el año más lejano del que hay previsiones científicas, no son una gente son hipotética están naciendo hoy", y ha defendido la necesidad de aplicar una política a largo plazo por responsabilidad.

"Tanto si cumplimos el Acuerdo de París como no, los parámetros de esta civilización como la entendemos ahora no son prolongables", ha subrayado De Vicente, que ha explicitado que la muestra empieza con la frase de McKenzie Wark: 'Esta civilización se ha acabado. Y todo el mundo lo sabe'.

El recorrido se estructura en ocho escenas o historias sobre el planeta Antropoceno y los futuros posibles de la tierra, siendo el último espacio el laboratorio creado por la artista, ingeniera e inventora Natalie Jeremijenko, llamada Clínica de Salud Ambiental.

Con el Ministerio del Futuro, que protagonizará Morton, los organizadores quieren explorar cómo desde la creación artística y de forma colegiada se puede incidir en las políticas públicas, y a partir de enero trabajarán en una Declaración Barcelona.

UN RÍO CONTAMINADO

Artistas, filósofos, montañas de arena, novelistas, animales marinos, dramaturgos, plantas, arquitectos, objetos, diseñadores especulativos, ríos contaminados, satélites y científicos se unen en esta exposición para contar historias "desde la empatía" en una experiencia hipnótica que habla del trauma ante la magnitud de la crisis.

Una de las salas más curiosas es el apartamento de 2050 en que las sequías y huracanes han cambiado la forma de alimentación de los humanos, diseñado por el estudio de diseño ficción Superflux así como el proyecto de arquitectura utópica que imagina la atmósfera como un nuevo territorio para la expansión de la humanidad.