Con su voz aflautada, su paso lento como de ‘guagua’ y su sonrisa eterna el bueno de Juan Carlos lleva 753 partidos a las espaldas, 52 goles y tantos toques de balón como briznas de hierba tienen los tapetes del Gran Canaria, Luis Sitjar, Vicente Calderón y Riazor. A sus 40 años, lejos de abandonarse al más que merecido descanso o buscar los millones del petróleo, sigue repartiendo pases y sonrisas en sus Palmas del corazón. Y subiéndolo a Primera. Y llevándolo a los cuartos de final de la Copa del Rey.
Valerón nació un 17 de junio de 1975. En su primera temporada como profesional, en Las Palmas, el Atlético de Madrid ganaba un doblete histórico. Sí, hace 20 años. En su primer año en primera, en el Mallorca, el equipo insular todavía jugaba en el Luis Sitjar. Por cierto, desde aquel debut en la máxima categoría al canario no le han expulsado nunca: 45.109 minutos de fútbol sin utilizar nada más que su talento para el pase y la distribución a fuego lento.
Valerón nació en el 75, decíamos, y echando un vistazo a esa quinta, es prácticamente imposible encontrar un solo jugador de talla mundial que siga en activo. Por no decir imposible. Y no podemos dejar de preguntarnos, si Valerón ha podido vencer al desaliento de la edad y a la ambición de los petrodólares, qué once tendríamos entre manos si sus ‘quintos’ hubieran tenido los ‘bemoles’ de seguir pegándole patadas al balón. Ojo al equipazo.
En la portería, difícil dar con un portero de 1975 de la talla de los nombres que van a formar las líneas de campo. Difícil, pero no imposible. Jose Manuel Pinto, siempre a la sombra de Valdés en el Barcelona de todos los tiempos, sólo por palmarés y por haber aguantado el tipo en los momentos difíciles es el hombre a elegir. Y por haber defendido por méritos propios la portería blaugrana en cuatro finales de la Copa del Rey, con dos títulos ganados en 2009 y 2012, y dos perdidos -la gran sombra de su carrera- contra el eterno rival en 2011 y 2014.
La línea de atrás, la zaga de nuestra generación 75, la formarían Gio, Helguera, Neville y García Calvo. Cinco Champions en sus botas. Y 21 ligas. Entre ellos, el que más estiró los cordones de las botas, el inglés. Se retiró en 2011 ganando la Premier con el Manchester United, a años luz de los todavía cinco años más que ha aguantado Valerón.
Junto al canario, en el centro del campo, magia a raudales. Un mediocentro para hacer temer a cualquier equipo y para haberlo ganado todo de haber jugado junto. Beckham, Verón y Juninho Pernambucano serían los elegidos de los nacidos en 1975 para formar al lado de Valerón. El más veterano de los tres, el brasileño, que ha aguantado hasta este mismo año 2016 para retirarse. Es, de todo el once del 75, el que ha conseguido llegar más lejos a excepción del héroe canario.
Y delante, dos arietes míticos de esta generación que despidió el siglo XX y abrió las puertas del XXI. Roy Makaay y Hernán Crespo. Entre otros títulos, suman siete de las cuatro principales ligas del mundo (Italia, Inglaterra, Alemania y España). Nada menos que 588 goles entre sus dos pares de botas. El último en retirarse, el argentino en 2012. Y cuatro años después, Valerón sigue dando guerra.