Los dos mejores porteros españoles de la última década, si no de la historia, están viviendo un verano enrarecido. Primero, Casillas ha tenido que decir adiós al club al que ha dado toda una vida al no ver nada claro su futuro dentro de ese vestuario. Y ahora, Víctor Valdés, el hombre que defendió la portería del Barça en tres de las cuatro Champions logradas en este siglo, ha tenido que ver cómo su actual entrenador echa por tierra, como mínimo, su profesionalidad.
Van Gaal, en la línea habitual que ha mantenido durante años, 'nunca positivo', ha defenestrado al portero diciendo que se negó a jugar con el filial del United, y que por ese motivo es un jugador que no tiene sitio en el club inglés. No hay nada como un buen tuit para callar bocas, aún mejor si es de esos de pocas palabras y más imágenes. Sin más, eso es lo que ha hecho Valdés: responder en Twitter recordando tres partidos que jugó con el filial la temporada pasada y pidiendo respeto.
El portero 'novato' -recordamos, tres Champions, seis Ligas, dos Copas, una Eurocopa y un Mundial, entre otros títulos-, tira así de elegancia para responder a un comentario absurdo que, en realidad, podría haberse respondido con sólo enumerar el palmarés del jugador. Pero es que Valdés ha demostrado ya una entereza fuera de lo normal. Primero, siendo honesto con su decisión de no seguir en el Barça aun cuando el Mónaco, con quien tenía apalabrado el fichaje, le dejó tirado tras lesionarse. Después, soportando un año sin apenas minutos, debutando con el primer equipo en mayo y relegado a jugar con el filial. Por eso, las críticas de Van Gaal están fuera de lugar y le retratan... ¿de verdad un entrenador de su experiencia es capaz de pedir a un portero como Valdés que juegue con un equipo de Segunda División?