La popular desarrolladora de videojuegos Brianna Wu vivió una situación desagradable el pasado fin de semana, cuando un usuario de Internet comenzó a publicar mensajes intimidatorios hacia ella y su familia. El usuario amenazó con violarla y matarla, aludiendo a sus ideas feministas.
Después de una serie de mensajes intimidatorios, Brianna vio como la dirección de su domicilio era publicada en Internet, y otros usuarios se sumaban al acoso y las amenazas. Fue entonces cuando la desarrolladora decidió dar aviso a la policía y abandonar su casa junto con su marido.
No es la primera profesional de la industria de los videojuegos que sufre algún tipo de acoso por parte de los usuarios de Internet. Zoe Quinn, otra desarrolladora norteamericana, fue uno de los casos más sonados este verano, cuando el escándalo ‘Gamer Gate’ llegó a su punto álgido. Por su parte, la feminista Anita Sarkeesian también tomó la decisión de abandonar su domicilio después de recibir numerosas amenazas a través de Interne, después de la publicación de su vídeo ‘Tropes vs. Women in Video Games’, en el que criticaba el rol de los personajes femeninos en algunos videojuegos.
Tampoco era la primera vez que Brianna Wu recibía amenazas. Hace unas semanas publicó que llevaba desde enero sin atreverse a caminar sola desde su casa hasta su coche.
Algunos usuarios de Internet han aprovechado la ocasión para alimentar la controversia generada por el movimiento ‘Gamer Gate’, acusando a Brianna Wu de haber fingido el escándalo para darse publicidad. Brianna ha anunciado a través de su cuenta de Twitter que la policía está investigando al autor de las amenazas y que ella seguirá desempeñando su trabajo "haciendo videojuegos y hablando por las mujeres con el objetivo de cambiar la cultura imperante".
Este es tan solo uno de los episodios que han tomado notoriedad pública desde el estallido de la controversia generada por el 'Gamer Gate'.