Erdogan afirmó el domingo que las prácticas del Gobierno de Angela Merkel "no son diferentes a las de los nazis", como parte de su crítica por la cancelación de los actos que los ministros de Finanzas y Justicia de Turquía tenían previsto hacer en Alemania con motivo del referéndum constitucional.
Las autoridades turcas están haciendo campaña a favor del 'sí' de cara a la consulta popular del próximo 16 de abril, también en Alemania, donde viven 1,4 millones de ciudadanos turcos. La nueva Carta Magna crea un sistema presidencialista que otorga poderes ejecutivos a Erdogan.
Alemania ha esgrimido razones de seguridad para impedir estos actos electorales. Altmaier, por su parte, ha subrayado este lunes la "legalidad" de esta decisión y ha enfatizado que el país europeo "es insuperable en lo que se refiere a tolerancia y liberalidad".
El ministro de Justicia alemán, Heiko Maas, ya calificó el mismo domingo de "infames" las palabras de Erdogan. "Son una salida escandalosa del déspota del Bósforo", espetó, por su parte, el secretario general de la Unión Socio Cristiana (CSU) Andreas Scheuer.