En Taipei, para trasladarse a sus ciudades limítrofes lo más rápido es el metro: barato y muy eficiente. Los taxis no son nada caros aunque el viaje puede durar más de lo previsto por culpa de los atascos. Para moverse por la isla, el tren de alta velocidad es la mejor opción. Y para los aventureros, una moto siempre permite descubrir rincones inaccesibles al este de la isla.