El famoso desierto de Judea: desde el palacio de Herodes hasta las playas del mar Muerto

  • 'Viajeros Cuatro' llega hasta el desierto de Judea, a menos de dos horas de Belén, durante su viaje por Israel

  • El palacio de Herodes y el Templo de Masada: las "ruinas" en el desierto a 450 metros de altitud

  • El mar Muerto, el punto más bajo de la tierra, a 420 metros por debajo del nivel del mar

‘Viajeros Cuatro’ se adentra en el desierto de Judea en su viaje por Oriente Próximo, conociendo cada parte de Israel. A menos de dos horas en coche se encuentra este importante escenario bíblico que conocemos de la mano de Aarón García, guía turístico.

En una colina del desierto de Judea aún quedan resquicios de lo que fue el palacio de Herodes. Una construcción “a lo grande, todo lo que construía era brutal”, señala Aarón García. Aunque ahora solo hay ruinas del Templo de Masada, situado a 450 metros de altitud.

Durante el tiempo de Herodes se creó un gran agujero en la tierra para recolectar agua, que hoy se puede visitar. Un lugar donde se puede “sentir la grandeza de Herodes”, se trata de un depósito de agua impensable para aquella época, “de esas dimensiones hace 2.000 años, la verdad es que impresiona muchísimo”.

Del punto más alto, llegamos al más bajo, el mar Muerto, por debajo de los 420 metros del nivel del agua. En esta zona a las afueras de Belén se pueden encontrar numerosas playas y hoteles. Incluso se ha llegado a decir que el famoso Michael Jackson visitaba sus aguas para tratarse, según comenta el guía turístico, por sus minerales y el lodo.

Cada vez queda menos agua en el mar Muerto, conocido por su alta concentración de sal, “por lo tanto, cada año, desde los años setenta, el mar retrocede un metro”. En sus aguas no encontrarás peces y algas, además de que podrás flotar libremente, eso sí, Aarón García recomienda que el agua no te toque los ojos, ni tampoco la boca, “te podrías intoxicar”.