Los seis candidatos a finalistas han tenido una hora para pensar cómo sorprender a la princesa y convencerla de que ellos son el mejor príncipe azul que podría encontrar. Quique con una canción y un coro de 'guiris', Jorge rapándose la cabeza, El 'Capitán América' con una retrato de la propia Corina, Diego con un baile de los más sensual y Pedre con un baño a 'bomba', han tratado de hacerse un hueco en el corazón de la protagonista de este cuento.
Pero sólo tres de los seis candidatos a ocupar el corazón de la princesa podían llegar a la final, y la joven decidía darle a Quique las primeras calabazas del programa. "Me encanta como eres, me alegras siempre y admiro tu filosofía de vida aunque no la comparta. Te deseo lo mejor del mundo", se despedía Corina del concuirsante Neerd.
El gran momento estaba cada vez más cerca, pero Corina todavía tenía que dejar en el camino a dos de los candidatos a ocupar su corazón. La princesa. Tras un paseo en barco en el que todos los candidatos a príncipe han tenido la oportunidad de conquistar a la joven con sus besos, la guapa princesita de este cuento eliminaba a Jorge Caín.
Las cosas para Pedre tampoco iban mejor y Corina le plantaba poco antes de la gran final. "Decirte que si has llegado aquí es por lo simpático que eres y por lo mucho que me has hecho reír", trataba de animarle la joven poco después de dejarle fuera de su cuento.
El 'Capitán América', Pascual y Diego, los finalistas
Corina se enfrentaba al momento más esperado por todos: elegir a su príncipe azul. En una ceremonia propia de cuento, vestida como una auténtica princesa y acompañada por todos sus candidatos a ocupar sus corazón, su hermana, Javi y su padre, la protagonista del programa eliminaba a Andrés, el preferido por el padre de la joven.
Pascual y Diego luchaban por ocupar el corazón de Corina. Como si de la mismísima Cenicienta se tratase, Diego era el primero en probarle el zapato a la princesa. Pero el calzado no encajaba en su pie y el guapo pretendiente no lograba conquistar el corazón de la bella princesa.
Pascual tuvo más suerte, ya que la horma de su zapato encajaba a la perfección en el pie de la princesa de su cuento. Ya convertido en el príncipe de Corina, la pareja sellaba su final feliz con un beso y un baile digno del mejor cuento.