El Villarreal amargó el debut de Gareth Bale con la camiseta del Real Madrid tras firmar el empate (2-2) en la cuarta jornada de Liga, un duelo celebrado en El Madrigal que aireó las carencias defensivas del conjunto merengue, aún sin patrón de juego y excesivamente dependiente de su punta de lanza: Cristiano Ronaldo.