En el segundo programa de la sexta temporada, Rocío Ramos-Paúl se traslada hasta Guadalajara para asesorar a una familia con problemas de alimentación.
Irene, de 7 años, sólo come aquellos alimentos que son de su gusto. Ella elabora su propio menú y su grado de exigencia ha llegado hasta tal punto que cualquier cambio provoca una crisis familiar. Mara, su hermana pequeña, ha empezado a imitarla y los padres están sumamente preocupados.
Las horas de la comida se hacen eternas y siempre acaban en enfados. Como las comidas monopolizan por completo la vida de esta familia, apenas queda tiempo para jugar o practicar nuevas actividades con las niñas.
Irene, además, utiliza la comida para llamar la atención de Jorge y Susana, sus padres, y manejarlos a su antojo. Ellos no saben cómo responder a sus continuas amenazas. Por si esto fuera poco, Jorge sufre con el rechazo diario de su hija pequeña.
Tras analizar intensamente esta situación, Supernanny les enseñará cómo conseguir sus objetivos. Los progresos dependerán de la firmeza que los padres estén dispuestos a mantener con sus hijas pero deben tener claro que el proceso va a ser lento.
Supernanny: los viernes, a las 21h30. Y en la web, el último programa durante siete días en play cuatro .