En palabras de Jacobo Eireos, director de “Palabra de Gitano”, esta segunda temporada “quiere ir un paso más allá, y veremos escenas que nunca antes se habían visto en televisión, como una mediación realizada entre dos patriarcas para que dos familias no se enfrenten. También hemos viajado a Argentina donde descubrimos a la comunidad de gitanos españoles más numerosa del mundo”.
En su opinión, “este programa ha dado voz a personas que nunca se habían podido expresar sin sentirse encorsetados. Nuestra intención siempre ha sido mostrar la realidad que no se había visto antes, sus costumbres más arraigadas, sus tradiciones y un tipo de gitano que tiene mucho que contar.”
A lo largo de cada una de las entregas, “Palabra de Gitano” abordará el éxodo y el pasado nómada de esta comunidad, mostrará cómo gestionan su talento y el vínculo que les une a su cultura, basada en hondas raíces familiares.
Gitanos residentes en otros países como Francia o Argentina que tuvieron que huir de la dictadura española; el “duende”, un bailaor que con tan sólo seis años es una figura del flamenco en Francia; el arte a caballo de Rafael Soto, único medallista olímpico español en la disciplina de doma clásica; la música de Nyno Vargas, un rapero gitano con legiones de fans en las redes sociales, y el trabajo de un grupo de jóvenes empresarias gitanas serán algunos de los protagonistas de esta temporada.
Orgullo, talento, tradición y devoción, claves de la nueva temporada
La veneración y el fervor religioso también son parte de la identidad gitana y se verán reflejados en los episodios de “Palabra de Gitano” de esta nueva temporada. Más del 80% de los gitanos son evangélicos, pero existe una minoría católica que no duda en mostrar su devoción a vírgenes y santos como la Virgen del Rocío o Santa Sara Kali, la única santa gitana.
“Para poder contar esta realidad del pueblo gitano”, explica el director de “Palabra de Gitano”, “hemos pasado muchas horas en su entorno, en sus barrios, en sus casas. Solo así se puede llegar a tener un grado muy alto de confianza que nos permita mostrar historias y hechos que nunca antes se habían podido grabar. Ese es el verdadero éxito del programa, escuchar y hacer que los gitanos se sientan muy cómodos mostrando cosas muy personales”.
La docuserie producida por Cuatro en colaboración con La Competencia alcanzó en su primera temporada una media del 9,4% de share superando en su franja de emisión a Antena 3 (9,3% y 1.937.000 espectadores). Incrementó su cuota en target comercial hasta un 11,2% de share. Por edades alcanzó un 14,5% y un 13,6% de cuota entre el público de 25 a 34 y de 13 a 24 años, respectivamente, y con Andalucía (12,6%) y Castilla-La Mancha (11,6%) como las Comunidades Autónomas con mayor seguimiento.
El talento para los negocios, la venta y las relaciones sociales, en la primera entrega
“Palabra de gitano” aborda en su primera entrega historias humanas que ponen de manifiesto diversos talentos que algunos gitanos desarrollan cada día.
El talento para los negocios quedará patente con el clan de Los Pedrillos, en Valencia, y Los Motos, en Salamanca, dos familias dedicadas desde hace generaciones a la compra-venta y doma de caballos. Todos los miembros de esta familia tienen “chirumen”, la mezcla necesaria de habilidad, inteligencia e ingenio para llevar a buen puerto los tratos comerciales de los que depende el bienestar del clan. “Palabra de gitano” mostrará por primera vez los entresijos de este tipo de transacciones en los que cada miembro de la comunidad tiene un rol, desde el jinete que muestra las virtudes del animal hasta los “animadores” que impulsan la venta con propuestas que van acercando posiciones hasta el acuerdo final.
El Rastro de Madrid es el mejor escenario para mostrar el talento calé para la venta. En ese mercado, del que el 90% de los puestos pertenecen a los gitanos, se reúnen desde hace años distintas generaciones para vender todo tipos de bienes: ropa, bisutería, antigüedades y objetos de distintas clases. Es el caso de José López, tercer descendiente de una saga de vendedores ambulantes, o de Carmen “La China”, una niña que sigue a rajatabla los consejos de su abuelo: “no tener laché”, y para quien la venta ambulante es su vida.
Las habilidades sociales constituyen otros de los talentos gitanos, tanto dentro como fuera de su comunidad. Para mantener la armonía entre sus miembros, es vital contar con la mediación de los “arregladores”, personas de edad respetadas por todos y cuya palabra es ley. Por primera vez en la televisión, “Palabra de gitano” mostrará una de estas mediaciones llevada a cabo por dos gitanos “arregladores” que solventan con su habilidad y experiencia pequeños y grandes conflictos.
Pero, sin duda, las habilidades sociales alcanzan su máxima expresión durante los “pedimentos” o uniones sentimentales celebradas entre familias. La primera entrega de “Palabra de gitano” concluye con el “pedimento” de dos jóvenes pertenecientes a dos conocidos clanes salmantinos. El joven, último representante de Los Motos, se une en una gran fiesta a Mireia, una gitana “rubia” de 19 años. La celebración servirá para reunir a los miembros de ambas sagas y para estrechar lazos comerciales con clientes y futuros compradores.