Barcelona, testigo de la violencia de algunos manifestantes taxistas que la emprendieron con los VTC

Las calles de Barcelona han sido escenario de una violencia extrema. “¡Hay una niña! ¡Hay una niña!” gritaba y repetía el conductor de un VTC antes de que un grupo de taxistas la emprendiese a golpes con su coche. En su interior viajaba una familia francesa con su hija, cuyo padre al intentar salir fue fuertemente golpeado. Los Mossos D’Esquadra han tenido que escoltar a varios VTC para librarles de los ataques que se han sucedido por todos los rincones.

Los piquetes han obligado finalmente a suspender el servicio de este sector. Dos conductores han resultado heridos graves.

Las protestas contra Uber y Cabify han dejado decenas de afectados. “Son las vacaciones de la gente, con lo que al final se mezclan las cosas”, lamentaba un viajero.

Los taxistas se quejan de que los coches del llamado servicio de alquiler de vehículos con conductor les quitan el trabajo. “Aquí estamos para exigir a los políticos que cumplan la ley”, decía una manifestante. La protesta ha colapsado el centro de la ciudad y la jornada de huelga continuará este jueves. Piden una licencia de VTC por cada 30 taxis.