Apps educativas que sí funcionan: 5 herramientas recomendadas por expertos y docentes
Las apps educativas pueden convertirse en grandes aliadas en el aprendizaje, pero hay que saber cuáles escoger para que cumplan lo que prometen
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Un recurso habitual para reforzar el aprendizaje de los niños y adolescentes son los dispositivos electrónicos y aplicaciones educativas. No obstante, no todas las apps cumplen con su promesa de enseñar de manera efectiva; algunas se enfocan más en el entretenimiento que en el aprendizaje. Por lo que escoger herramientas educativas de calidad, basadas en evidencia y recomendadas por expertos y docentes, puede ser fundamental para que la tecnología realmente sea útil para el desarrollo académico y mental de los estudiantes.
Muchos estudios sobre educación digital muestran que las aplicaciones más efectivas son aquellas que combinan aprendizaje activo, gamificación y retroalimentación inmediata. Además, suelen fomentar la autonomía del estudiante, estimular la creatividad y permitir que los docentes puedan supervisar el proceso de manera sencilla. Las mejores aplicaciones son aquellas que tienen un equilibrio entre diversión y enseñanza de habilidades académicas y socioemocionales, desde matemáticas y lectura hasta programación y pensamiento crítico.
5 apps educativas que sí funcionan
Khan Academy
Khan Academy es una de las plataformas educativas más reconocidas a nivel mundial, con recursos gratuitos para estudiantes de todas las edades. La aplicación ofrece lecciones en video, ejercicios interactivos y evaluaciones personalizadas en materias como matemáticas, ciencias, economía e historia. Además, permite que los docentes y padres hagan seguimiento del progreso de los estudiantes.
Duolingo
Duolingo es una aplicación de aprendizaje de idiomas que combina gamificación con microlecciones efectivas. Está diseñada para motivar a los estudiantes mediante recompensas, niveles y desafíos diarios, fomentando la constancia y la práctica diaria. Sus ejercicios incluyen lectura, escritura, comprensión auditiva y pronunciación, lo que permite un aprendizaje integral del idioma.
Scratch
Esta plataforma ha sido desarrollada por el MIT, y en ella niños y adolescentes pueden aprender programación y pensamiento lógico mediante la creación de animaciones, juegos e historias interactivas. La aplicación promueve habilidades de resolución de problemas, creatividad y trabajo colaborativo, siendo muy útil para introducir conceptos de informática de manera lúdica.
BrainPOP
BrainPOP es una plataforma educativa que combina videos animados, cuestionarios interactivos y juegos educativos en materias como ciencias, matemáticas, salud, artes y tecnología. Su enfoque en la gamificación y la interactividad ha demostrado aumentar la retención de información y motivar a los estudiantes a explorar distintos temas de manera autónoma.
Esta plataforma es especialmente efectiva para estudiantes de primaria y secundaria, ya que tiene contenidos claros y didácticos, adaptados a distintos niveles de edad y comprensión. Además, los profesores pueden crear clases virtuales y seguir el proceso de cada alumno, personalizando el aprendizaje según sus necesidades.
TypingClub
Se trata de una aplicación para aprender mecanografía mediante lecciones interactivas y juegos, ayudan a los estudiantes a mejorar su velocidad y precisión al escribir. Tiene lecciones progresivas adaptadas a distintos niveles, un seguimiento del progreso y estadísticas detalladas, además su interfaz es sencilla y motivadora. También está disponible en español.
Consejos para elegir aplicaciones educativas efectivas
La gran oferta de aplicaciones que hay disponibles hace que escoger una herramienta educativa adecuada sea algo más difícil. Aunque muchas se presentan como “educativas”, no todas cumplen realmente con ese objetivo. Por eso, es importante tener en cuenta algunos criterios antes de descargarlas e incorporarlas al aprendizaje de los niños.
Lo primero es buscar una aplicación que esté recomendada por instituciones educativas, docentes o plataformas reconocidas como Edutopia. Las apps deben estar evaluadas por su eficacia pedagógica, su seguridad y su impacto real en el aprendizaje. Algunas incluso cuentan con estudios que demuestran mejoras en áreas específicas.
También se debe evaluar la interactividad y el aprendizaje activo, ya que las mejores aplicaciones no se limitan a mostrar la información, sino que también permiten que el estudiante pueda participar activamente resolviendo problemas, creando proyectos, experimentando y recibiendo feedback inmediato. La gamificación mediante puntos, retos o recompensas, puede ser una gran aliada, siempre y cuando esté equilibrada con un aprendizaje de calidad. Esta característica ayuda a motivar al estudiante a practicar diariamente sin perder el enfoque educativo. Lo más importante es que el niño no se quede solo en que puede “ganar puntos” sino que debe interiorizar lo aprendido.
Por supuesto, hay que tener en cuenta que cada estudiante tiene un ritmo y unas necesidades distintas. Las aplicaciones más efectivas son aquellas que pueden adaptar sus contenidos al nivel del estudiante, ofreciendo refuerzos cuando hay dificultades o desafíos adicionales si avanza más rápido.
Un factor muy importante es que sea una aplicación segura ya que los niños son los principales usuarios. Se deben evitar las aplicaciones con publicidad invasiva o compras ocultas que puedan afectar la experiencia de aprendizaje o exponer a los menores a riesgos innecesarios.
Algo muy útil es explorar las reseñas en Google Play, App Store o foros educativos, de esta manera se puede conocer la experiencia real de otros padres, docentes y estudiantes.
Por último, hay que recordar que aunque una aplicación sea educativa, no debe sustituir al acompañamiento de padres y profesores.
