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El sol volverá a apretar hasta el fin de semana para despedir un verano que deja 2.800 muertes por calor

El jueves las máximas serán propias de julio. IMAGEN: Noticias Cuatro
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Avanzamos en una semana de septiembre marcada por un calor de verano acompañado de calima. Ingredientes más propios además del mes de agosto que obligan a activar los avisos por polvo en suspensión en Canarias y por altas temperaturas en zonas del sur de la península como Sevilla. La situación aún se mantendrá unos días, informan Eduardo Abión y Marta Álvarez en el vídeo.

Los termómetros van a tocar techo este jueves con un mapa rosado típico del verano que implica máximas de entre 36ºC y 38ºC en todo el centro peninsular. Los vientos del sur llegarán también al Cantábrico: se prevén 38ºC de máxima en Bilbao y en Córdoba se alcanzarán los 40ºC. También en Extremadura y en el archipiélago canario serán elevadas las temperaturas.

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El verano se despide a lo grande especialmente en el sur

Es justo en las islas donde más se va a notar esa calima, de ese polvo en suspensión, con avisos activos por parte de la AEMET debido a la elevada concentración. Pero el polvo llegará también a la península, empezando a notarse en puntos del sur, más atenuada, y extendiéndose ya el jueves a zonas del centro e incluso del norte del país. El resultado será esa mala visibilidad en el ambiente.

El calor también apretará, especialmente en el Valle del Guadalquivir. Este miércoles es el segundo día con aviso amarillo por temperaturas extremas en Sevilla, donde los termómetros están en torno a los 38ºC. No solo en la capital, la imagen en toda Andalucía es la típica de julio, con gente buscando la sombra, mangas largas y abanicos por las calles. El calor va a acompañar toda la semana dejando avisos al menos hasta el viernes, superando incluso los 40ºC.

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A partir del lunes se desploman los termómetros

El verano que se despide a lo grande. Hasta el viernes seguiremos hablando de elevadas temperaturas en la mayor parte del país. Pero a partir del fin de semana llega un embolsamiento de aire frío que nos va a traer una bajada muy acentuada de los termómetros además de precipitaciones. Para el lunes el mapa habrá cambiado completamente con descensos de más de 15 grados en las máximas.

Los mercurios se quedarán en torno a los 16ºC o 18ºC en el cantábrico. En Madrid se superarán este jueves los 36ºC mientras que el lunes la máxima prevista es de 19ºC. Estarán también por debajo de los 26ºC en el resto del país. El domingo toca sacar el abrigo del armario.

Adiós al verano más caluroso, que deja cientos de muertos por calor

La AEMET ha confirmado que el de 2025 ha sido el verano más cálido desde que hay registros. Junio pasará a la historia por sus temperaturas de récord y agosto por sus incendios. El cambio climático estaría detrás de 2.800 muertes por calor en España este verano. Lo dice un estudio del Imperial College de Londres que analiza las muertes por calor en 854 ciudades europeas.

Sin contar el cambio climático, 7.900 personas habrían muerto en Europa este verano. Pero si le sumamos el cambio climático, que ha provocado una subida extra de temperaturas de hasta 3,6 grados, han muerto otras 16.500 personas. Es decir, el 68% de todas las muertes de este verano se pueden atribuir al calentamiento global.

Los países en los que más gente ha fallecido por esos valores extremos son Italia, con 4.597; España, donde se registraron esas 2.841, y Alemania, donde hubo unas 1.470. Por ciudades, la húmeda Barcelona fue la tercera con más muertes por calor, solamente superada por Roma y Milán.

No son tanto los golpes de calor, sino el estrés térmico

El calor extremo mata. Así de claro lo advierten científicos y médicos desde hace años. El cambio climático "está convirtiendo las olas de calor en un problema de salud pública", asegura Lorenzo Armenteros, de la Sociedad Española de Médicos de Familia. Un "asesino silencioso" que es responsable de 16.500 muertes este verano en Europa.

Pero son muertes evitables que el cambio climático ha triplicado. Por eso, Armenteros insiste: "Hay que actuar hacia el futuro ya que estas muertes con pequeñas actuaciones podrían ser prevenidas en los años venideros". Y es que las culpables son unas temperaturas demasiado altas y demasiado prolongadas en el tiempo. El problema ya no son los golpes de calor, sino el estrés térmico.

Las consecuencias del calor extremo en el cuerpo

Lo explica Lorenzo: "Una sensación de malestar continuado y poco definido que va de una forma paulatina afectando todos nuestros órganos, desde el corazón hasta el cerebro, para producir un fallo total y en ocasiones la muerte de este tipo de pacientes". Las altas temperaturas constantes influyen en la capacidad del cuerpo humano de funcionar, poniendo en riesgo a los más mayores.

El Mediterráneo español está en las zonas con más riesgo. "En las ciudades donde el grado de humedad es muy alto y la temperatura es muy alta se multiplica este efecto devastador que puede tener sobre nuestro cuerpo", apunta Armenteros. Y un problema más: el 85% de las muertes extra son de mayores de 65 años. Los científicos advierten de que Europa se enfrenta a un cóctel letal, veranos cada vez más cálidos y una población cada vez más envejecida.