El incendio está controlado pero siguen trabajando 100 bomberos con 22 dotas terrestres y dos medios aéreos
Los incendios de sexta generación, cada vez más comunes: violentos, impredecibles y difíciles de controlar
TorrefetaEl incendio de la Segarra en Lleida ya está controlado. Durante toda la noche, los bomberos han trabajado en las labores de extinción para refrescar el perímetro de las llamas. Según informa Carlota Lacambra, siguen remojando la zona porque aún son visibles pequeñas columnas de humo.
El incendio está controlado pero siguen trabajando 100 bomberos con 22 dotas terrestres y dos medios aéreos casi 48 horas después. Hoy es un día de valoraciones en zonas como, por ejemplo, en un pueblo en el que ven cómo quedó completamente rodeado por las llamas. Otra granja de la localidad también. El fuego pasó justo por encima, pero la estructura como los animales quedaron completamente intactos.
El origen fue la chispa de una máquina que cosechaba cereal
Un terreno completamente calcinado es lo que ha quedado tras el mayor incendio de la temporada. Los bomberos lo dan por controlado después de calcinar más de 5.500 hectáreas y acabar con la vida de dos agricultores. El objetivo ahora es controlar el flanco izquierdo una vez consolidado el derecho que amenazaba con llegar al Valle del Segre.
La meteorología sigue siendo complicada, pero hoy las temperaturas han bajado ligeramente. Ha sido un fuego de sexta generación por su virulencia y por su velocidad de propagación. Su origen ha sido la chispa de una máquina que cosechaba cereal, según las primeras hipótesis. La velocidad de propagación de las llamas alcanzó los 28 kilómetros por hora.
El conseller de Agricultura se reúne con los agricultores
“Vivimos unos momentos de mucha tensión, de mucha impotencia, de mucho nerviosismo”, reconoce un residente de la zona. Hoy se celebra una reunión del conseller de Agricultura con los agricultores que no disimulan su enfado por la falta de coordinación en las labores de extinción en las que no les han dejado participar.
“Es que el incendio durante una hora y media estuvo quemando, pero era un incendio normal. Lo que pasó después fue cuando cruzó la carretera, que fue entonces cuando se levantó el aire de la tormenta. Aquello sí que era imparable”, recuerda otro hombre. Un incendio imparable que ha arrasado la comarca leridana de la Segarra.