Desesperación y angustia tras el vuelco de un cayuco en El Hierro: los momentos de la tragedia

Entre los muertos hay cuatro mujeres adultas y tres menores de edad
Siete muertos y una bebé desaparecida en el vuelco de un cayuco con 180 migrantes en El Hierro
El HierroLa embarcación volcó entrando en el puerto de la Restinga, en El Hierro. Al estar tan cerca del pueblo hay imagen de la tragedia, lo que pone de manifiesto lo que sigue ocurriendo y que no vemos. Estuvieron cinco días de travesía en alta mar. Según el Ministerio del Interior llegaron en 2024 46.843 personas. Según informa Romen García, los cayucos no pueden desembarcar por sí mismos, sino que lo hacen a través de las embarcaciones de Salvamento Marítimo.
La ONG Caminando Fronteras estima que al menos 9.757 personas perdieron la vida solo el año pasado. En este caso, hay siete muertos entre las que hay cuatro mujeres adultas y tres menores de edad: una de ellas de 16 años y otras dos de cinco.

Muchos migrantes se quedan debajo sin poder salir a flote
Casi a las 10:00 horas de la mañana, Salvamento Marítimo remolca al Puerto de la Restinga de El Hierro un cayuco abarrotado. Alrededor de 150 personas estaban a bordo. Un oficial pidió calma mientras los migrantes estaban desesperados por tocar tierra tras días en alta mar.
Todos se van agolpando en un lateral y el peso en un lado de la barca hace que se vuelque. Los migrantes van cayendo al agua e intentan agarrase donde pueden. Mientras, los periodistas que están en el muelle no dan crédito a lo que ven. Muchos migrantes se quedan debajo, sin poder salir a flote. El resto intenta subir a la embarcación de Salvamento Marítimo como puede, con las pocas fuerzas que les quedan y con los músculos agarrotados tras días viajando hacinados, sin poder moverse.
Un joven llevaba un bebé en sus brazos y pedía que lo rescatasen
La tripulación empieza a arrojarles todos los aros salvavidas. Son momentos de caos en el que el cayuco se va alejando. Entre medias, en el agua, varios migrantes -incluidos niños- gritan socorro. En el casco bocarriba, resbaladizo, un joven lleva en sus brazos un bebé, lo señala y pide que alguien vaya a rescatarlo. Un hombre en bañador se tira al agua y poco después consigue que lo suban a cubierta.
Salvamento Marítimo y agentes de la Policía y de la Guardia Civil siguen rescatando cuerpos, como el de un niño que sacan en volandas. Los que suben a la embarcación se abrazan, explotan de alegría mientras una buceadora coge aire antes de tirarse al mar para continuar con las labores de rescate.
Los equipos de emergencias corrían con niños en brazos y mujeres en camilla
En la superficie, los equipos de emergencias corren con niños en brazos y mujeres en camilla. Cuando se pensaba que no había más personas en el agua, el cayuco se da la vuelta para sorpresa de todos los que estaban allí. De dentro, entre las lonas, empiezan a asomar varios migrantes que gritan que hay supervivientes. Han podido respirar gracias a burbujas de aire.
Levantan su brazo para que les saquen de allí y sus caras son de pánico, desencajadas, sin saber qué hacer. Entre el equipo de rescate también hay migrantes que intentan sacar los cuerpos sin vida de sus compañeros, con los que hace unos minutos compartían un cayuco en busca de un futuro mejor.