Los problemas de salud más comunes cuando llueve sin parar

Los periodos de lluvias prolongadas aumentan el riesgo de enfermedades respiratorias, alergias o dolores musculares
Después de tantos días sin que apenas salga el sol, la humedad y la falta de éste pueden afectar a nuestra salud física y mental
Las 5 alergias más frecuentes en España
MadridEn las últimas semanas han afectado a España una serie de sucesivas borrascas que han hecho que vivamos una situación muy diferente a la que estamos acostumbrados, sobre todo en el centro y sur del país. Ha estado lloviendo durante más de tres semanas tanto en Madrid como en zonas de Levante y Andalucía, donde las lluvias no son algo tan común en estas fechas.
Después de tantos días de lluvias, los efectos en la salud cada vez son más visibles y el ánimo de las personas influye dependiendo de cómo esté el tiempo. De hecho, se calcula que entre un 30% y un 60% de la población mundial sufre una alteración física o psicológica cuando hay cambios de tiempo como la humedad, temperatura, presión atmosférica o el viento.
Infecciones respiratorias: resfriados, gripe y neumonía
Las temperaturas más frías y la humedad alta hacen que la propagación de virus y bacterias que afectan al aparato respiratorio sea más sencilla. Durante los meses de lluvias prolongadas, los hospitales y centros de salud suelen registrar un aumento en los casos de resfriado común, gripe, bronquitis e, incluso, neumonía, sobre todo en personas mayores y niños.
Alergia y problemas respiratorios
La humedad ambiental puede tener consecuencias en las personas que tienen problemas respiratorios, en especial en aquellas que tienen asma o alguna otra enfermedad pulmonar crónica. Esta humedad persistente dentro de las viviendas puede fomentar la proliferación de moho y ácaros, lo que puede agravar o provocar estas alergias respiratorias u otros problemas respiratorios.
Además, los cambios de temperatura entre interiores calefactados y el exterior puede hacer que la sintomatología de las personas con afecciones respiratorias se agrave. Para prevenir complicaciones, se recomienda que se mantenga una correcta ventilación de los hogares para evitar que la humedad se acumule. En caso de ser necesario, se puede utilizar deshumidificadores o filtros de aire.
Las personas que sufran cualquier otra alergia estacional también pueden ver agudizados sus síntomas, ya que estas lluvias previas al inicio de la primavera ayudan a la aparición de gramíneas y malezas como la parietaria.
Dolores articulares y musculares
Muchas personas afirman que sienten un aumento del dolor en articulaciones y músculos cuando el clima es frío y húmedo. Esto se debe a que los cambios en la presión atmosférica pueden influir en la inflamación de las articulaciones y la circulación sanguínea. Este es un fenómeno especialmente molesto para aquellas personas que sufren artritis o enfermedades reumáticas.
Trastornos del ánimo: depresión y trastorno afectivo estacional
Las lluvias prolongadas hacen que la exposición al sol sea más reducida, algo que puede afectar al estado de ánimo y provocar episodios de tristeza, ansiedad o incluso trastorno afectivo estacional (TAE). Los psicólogos suelen recomendar que se mantenga una rutina de actividad física, una exposición a la luz natural siempre que sea posible y, en los casos más graves, que se consideren terapias de luz para mitigar los efectos del TAE.
Dolor de cabeza, migrañas o cansancio
Las lluvias afectan mucho a las personas con dolores de cabeza o migrañas. Cuando llueve, la presión atmosférica suele disminuir a causa de las nubes y las condiciones climáticas.
Este cambio de presión que se produce, puede desencadenar o intensificar los episodios de dolor de cabeza, ya que los vasos sanguíneos en el cerebro pueden reaccionar con los cambios en la presión exterior.
De la misma forma, si los días de lluvia duran más de lo que estamos acostumbrados, es común experimentar más cansancio o desmotivación.
También, es común tener la impresión de que se tiene más sueño, esto es debido a que cuando la luz solar incide en el nervio óptico, haciendo que la producción de melatonina disminuya, lo que se traduce en que se tenga una sensación de más energía. En los días de lluvia, como se tiene menos luz solar, esto sucede en menor medida.
Cansancio e irritabilidad en los niños
La falta de luz solar y la limitación que, de forma continuada, afecta en la realización de actividades al aire libre pueden influir en especial en los niños. Éstos, durante los días de lluvia, pueden estar más cansados, irritados y aburridos. Lo que se recomienda es que los padres mantengan una actitud positiva y aprovechen los momentos en los que no se pueda salir a la calle para pasar tiempo en familia, reforzando el vínculo con los niños a través de juegos de mesa, organizando una tarde de cine o haciendo actividades creativas como pintura, cerámica o teatro. También se puede realizar ejercicio dentro de casa a través de videos enfocados para niños y así, se mantienen activos.
Además, se recomienda también crear lugares acogedores para incitar a los niños a la lectura o también, pedirles ayudar en la cocina con recetas sencillas que ellos puedan hacer y que estén entretenidos haciendo actividades en las que se fomente una unión familiar.