El sacrificio y la belleza de la gimnasia rítmica, uno de los deportes de los JJOO: "Me lo ha dado todo"

La gimnasia rítmica es uno de los deportes más sacrificados. Esta disciplina se necesita esfuerzo y lucha, aunque la belleza de admirarlo no tiene precio. Patricia Pérez, Mireia Martínez e Inés Bergua lo saben bien. Ellas tres -junto a Salma Solaun y Ana Arnau- son las cinco jóvenes que representan a nuestro país en los Juegos Olímpicos de París 2024, donde los ganadores se llevarán una medalla con un trozo de París, según informa Sergio García García.

“Este deporte me lo ha dado todo. Desde que tengo tres años lo practico y las experiencias más bonitas e importantes de mi vida las he vivido gracias a esto”, sostiene Inés Bergua. Hace tan solo tres semanas, regresaron de Budapest con tres medallas.

Ellas son cinco deportistas. Cinco mentes conectadas para dibujar con su cuerpo lo que parece imposible. “Ha habido muchísimas horas de trabajo detrás de ese campeonato. Super felices porque se haya visto reflejado en el tapiz”, afirma Inés Bergua sobre su victoria en Budapest.

“Somos como hermanas, estamos todo el día juntas. Nos entendemos perfectamente solo con mirarnos”, añade Mireia Martínez. “Entre nosotras nos ayudamos bastante y tenemos psicólogos. Trabajando con ellos, llegas a fusionarte bien en las competiciones”, apunta Patricia Pérez. Y es que detrás de esta disciplina, hay horas de mucho esfuerzo. "Cuando era pequeña, me invitaban a un cumple y no podía ir porque tenía entrenamiento. Todo ese sacrificio ha merecido la pena", relata Mireia Martínez. Ahora, todas ellas tienen la vista puesta en su siguiente objetivo: París.