Aumenta el agotamiento de los médicos de varios puntos de España que denuncian que el actual sistema les obliga a hacer guardias de 24 horas. Se dirigen directamente a Mónica García, ministra de Sanidad, que ya se había posicionado previamente en contra de estas guardias de 24 horas, además de transmitir su deseo de querer eliminarlas.
Ahora le piden que cumpla, después de que médicos de toda España hayan iniciado una recogida de firmas, que ya acumula unas 45.000 para terminar con estas jornadas intensivas. Dicen que no es lo mismo atender a un paciente cuando has descansado que sin apenas haber dormido, sobre todo porque se toman decisiones vitales. Los médicos de hasta 55 años de la mayoría de las especialidades tienen que hacer estas guardias de 24 horas tras una jornada de trabajo normal.
La recogida de firmas llamada ‘Tu vida está en nuestras manos’ ha sido promovida por Tamara Contreras del Pino que es trabajadora en la UCI de un Hospital. Pretende acortar los turnos a 12 horas y que sea voluntaria su realización, para así poder disminuir el cansancio acumulado de los médicos y consiguientemente mejorar la atención que se ofrece a cada paciente. Otros países europeos como Francia, Reino Unido o Suiza ya avanzaron hace tiempo en este sentido.
Carmen, una médica que realiza guardias 24 horas, comenta que están muy cansados cuando les toca atender a un paciente a altas horas de la noche, cuando llevan trabajando en el hospital todo el día. Además, la capacidad mental a la hora de resolver problemas es mucho más lenta. Añade que les afecta a ellos de manera personal, porque muchas veces descansan allí muy pocas horas o prácticamente nada. Y lo que se descansa en el hospital no es como descansar en sus casas, por lo que tardan mucho en recuperarlo y en acostumbrarse a una vida normal.
La mayor parte del salario de los médicos procede de las guardias que realizan, por ello hay algunos que prefieren mantener el sistema actual. Esta situación desemboca en que en España falten médicos en la sanidad pública, y el hecho de que no haya mejorado la situación en los últimos años, provoca que muchos se marchen al extranjero o se pasen a la sanidad privada.