Hay lugares en el mundo donde el frío extremo no es excusa para nada. Como Yakustk, en Siberia, la ciudad más fría del mundo. Los 52 grados bajo cero no impiden llevar una vida normal a sus vecinos. La ciudad está situada a unos 450 kilómetros del círculo polar ártico y su población es de aproximadamente 300.000 habitantes. Muchas de ellas, son científicos especializados en diferentes ramas. El lugar es un importante centro cultural, científico y económico de la región. La región está construida sobre el permafrost, lo que significa que el suelo está permanentemente congelado, y esto influye en muchos aspectos de la vida en la ciudad. Por ejemplo, en plena calle se celebra el mercado de pescado... pescado congelado de forma natural. No hay opción de llevarlo fresco. Con estas temperaturas gélidas, los niños estudian desde casa, pero a los comercios y transportes nada les trastoca su rutina. Dadas las condiciones meteorológicas extremas que se viven en Siberia, las temporadas de frío son mucho más extensas que en otras partes del mundo. El invierno empieza en octubre. Alcanza su punto más gélido hacia enero, y termina en mayo. En el primer trimestre del año, el promedio de temperatura ronda los -38ºC. Las temperaturas más bajas jamás registradas en el planeta fuera de la Antártida se produjeron en la cuenca del río Yana, al noreste de Yakutsk. En el invierno de 2022, Yakutsk alcanzó los -64,4°C, lo que establece un récord de frío extremo para la ciudad, según registró National Geographic.