El Congreso estudia primar cláusulas sociales y medioambientales en sus contratos con terceros

La idea partió de los grupos parlamentarios de Unidos Podemos y Ciudadanos, cuyos representantes en la Junta de Contratación de la Cámara Baja decidieron encargar a los técnicos de la casa un informe sobre los actuales procedimientos de contratación pública para saber qué mejoras podrían introducirse.

Según han explicado a Europa Press fuentes parlamentarias, ese informe, ya redactado, recoge que el Congreso ya está teniendo en cuenta algunas medidas sociales y medioambientales a la hora de contratar con las empresas del sector servicios.

LA MESA DECIDIRÁ

No obstante, el objetivo que persigue tanto Unidos Podemos como Ciudadanos es que la Junta de Contratación del Congreso, presidida por Ignacio Prendes, vicepresidente primero de la Cámara y diputado de la formación naranja, es ampliar esas cláusulas.

Por tanto, en los próximos días ambos partidos tienen previsto redactar una propuesta sobre la base del informe que en este sentido han realizado los técnicos del Congreso para elevarlo a la Mesa, que es, en última instancia, la que dará el el visto bueno a las nuevas disposiciones.

Entre otras medidas, Unidos Podemos y Ciudadanos quiere que en los procesos de contratación se ponga en valor a las empresas del Tercer Sector, a aquéllas que cuenten con unos estándares de responsabilidad sociales y a las que primen los contratos a personas con una discapacidad del 33%.

EMPRESAS QUE CONTRATAN MÁS MUJERES Y A ONGS

De la misma forma, pretenden que se prime a las empresas que acrediten contratación de mujeres por encima de la media del sector y a las que tengan subcontratas con organizaciones sin ánimo de lucro, con centros especiales de empleo o empresas de inserción.

Por su parte, en el ámbito medioambiental, ambos grupos parlamentarios pretenden primar a aquellas empresas que avalen unas buenas prácticas en este área con los correspondientes certificados oficiales.

Según las fuentes consultadas, ésta son cláusulas que ya se están empleando con éxito en los procesos de contratación pública de muchos ayuntamientos españoles, entre ellos el de Barcelona, y la idea es éstas puedan aplicarse también en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.