El frío: ¿llega para quedarse?
El frío y la lluvia marcan el inicio de una nueva temporada
Los efectos del temporal Benjamín ya se notan en el norte de España
Seguro que han notado que el otoño ya se ha instalado y lo ha hecho con fuerza. Las temperaturas han caído en picado en todo el país, especialmente en el interior, donde el termómetro ha amanecido con valores muy bajos.
En Castilla y León, la pasada madrugada se registraron hasta cinco grados bajo cero, y en Valladolid los vecinos se despertaban hoy con dos grados.
“Creo que unos tres grados al salir de casa a las nueve de la mañana”, contaba una vecina de la capital vallisoletana. La sensación de frío ha sido generalizada. “Hombre, hoy más frío, bastante más frío. Se nota el cambio”, añadía otro ciudadano, abrigado hasta las oreja.
La brusca bajada de temperaturas ha provocado el inevitable cambio de armario. “Todo, todo ya. Ayer ya cambié todo”, confesaba una ciudadana entre risas, mientras otra relataba: “Tengo capas y capas y capas, abajo otra. Me estoy muriendo de frío”.
Y no solo en Castilla y León se han notado los efectos del otoño. En Galicia, el frío también ha sorprendido a los vecinos. “Hace frío, hace mucho frío. Mucho, mucho, mucho… ya viene el otoño calentito”, comentaba entre bromas un ciudadano en Lugo.
Sin embargo, para muchos el cambio ha sido demasiado brusco. “Es que de repente cuatro grados… pues de invierno total”, lamentaba una joven que, tras varias semanas de calor, no esperaba el regreso de las bufandas. “Y no, estoy pasando un frío de la...”, decía mientras tiritaba.
Ante las bajas temperaturas, más de uno ha tenido que volver a casa para abrigarse mejor. “Sí, la bufanda, los guantes, el plumas… todo”, explicaba otro vallisoletano que había salido demasiado confiado por la mañana.
En el sur, el cambio también se ha hecho notar. En Sevilla, el frío ha venido acompañado de las primeras lluvias otoñales. “Bueno, ya tocaba, ¿no? Un poco, que aquí en Sevilla se han retrasado lo más grande”, decía un vecino, sorprendido por las gotas que caían.
Otros, en cambio, celebraban el cambio de tiempo. “Encantada de ponerme una manguita larga y un chubasquero. Tenía ganas de que cambiase el tiempo, de que lloviese. Porque el campo estaba que da pena”, contaba una sevillana, feliz por la llegada del agua.
Las precipitaciones, que ya se han dejado sentir en Andalucía, se extenderán desde mañana al resto del país, según las previsiones meteorológicas. El otoño, ahora sí, se ha hecho notar: el frío y la lluvia marcan el inicio de una nueva temporada.
