El vídeo se grabó en las inmediaciones de un acuario de tiburones. Sobre uno de los cristales de la enorme ‘pecera’ se puede leer un cartel que dice “Toque bajo su propio riesgo”, mientras el animal pasa cerca del cristal. El visitante duda pero finalmente se decide a tocarlo. Sin esperarlo, el tiburón aparece y choca con el cristal, rompiéndolo. El visitante, del susto, cae al suelo. Por suerte todo quedó en susto, ya que todo era una broma lograda mediante los efectos de la pantalla.