Bienvenidos al país de los osos, puesto que así es conocido Yukon, una remota zona situada en el noroeste de Canadá. Un territorio peligroso con inquietantes glaciares, peligrosos rápidos y que en verano tiene 24 horas de luz al día. En Yukon, uno de los lugares más aislados de Norteamérica se encuentra el campo de hielo no polar más grande del mundo.
Si tienes la desgracia de encontrarte con un oso, lo mejor que puedes hacer es moverte lo menos posible para que no te vea, retroceder y si te ha visto tirarle algo que lleves como una mochila porque se quedará oliéndola.
Además no confíes en tu velocidad para salir huyendo, porque los osos a pesar de que son muy grandes y podría parecer que lentos, pueden correr más rápido que los humanos.
Si te encuentras una presa natural hecha por los castores puede ser un buen lugar para aprovechar para pescar truchas. La mejor manera es que tú también hagas una pequeña presa en la zona menos profunda y que con las manos intentes pescarlas. ¡Tienes que tener paciencia!
Nunca se te ocurra cocinar tu comida cerca de tu campamento, los osos tienen un excelente olfato. Así que separa por al menos 180 metros la zona de comida de la de sueño. Tampoco sería mala idea que te lavaras las manos para eliminar olores. No querrás verte sorprendido por estos animales en la noche.