"Un poquillo perra sí que seré, ¿no veis que lo llevo en la sangre?"

cuatro.com 05/11/2005 15:24

Glamour y mala leche, el personaje de Deborah Ombres nació en cabarets, festivales y discotecas con el espectáculo "¡Mamá, quiero ser Drágstica!", un show lleno de humor irónico. Apenas comenzado el nuevo siglo, Deborah Ombres llegó a la televisión, a través de un casting, “¡como todo el mundo!”. Tras su paso por la MTV (MTV Hot), una colaboración con Antena 3, y su participación en el programa Caiga Quien Caiga, esta deslenguada aguijoneadora de personajes y aconteceres de la actualidad llega ahora a Cuatro dispuesta a tomárselo todo como ella sabe, con mucho humor para ponerse al frente del concurso Rompecorazones.

¿Transgredir o escandalizar viejas?

Mucho mejor transgredir, eso abre la mente del que te ve y se aprende un montón con las transgresiones. Lo otro es muy fácil.

¿Qué es lo que te gusta y lo que odias del mundo del famoseo?

Del mundo del famoseo..., las fiestas esas que si las ves por la tele parecen divertidas y que luego cuando te invitan son un latazo. Lo que menos, toda esa gente que se hace famosa y gana dinero porque se han acostado con fulanito o menganito, y que son una panda de mamarrachos de calibre.

Un personaje que adores y otro que odies.

Adoro a Belén Esteban y detesto a Marujita Diaz, no puedo con ella.

Con humor, ¿vale todo?

Por supuesto. El humor siempre es bueno para todo en la vida y, a la hora de ver televisión y entretener al espectador, mucho más. El drama ya esta en los telediarios.

¿Qué hay en Cuatro que te haya hecho aceptar el programa?

La pregunta habría que hacerla al revés:¿Qué ha visto Cuatro en mí para que presente un programa?

Cuéntanos, hasta dónde se pueda leer, cómo va a ser tu programa.

Diversión, concurso, dinero, famosas y famosos, personajes. En fin, la pera limonera.

Por fin vas a tener algo de interacción todos los días... ¿Vas a ser dura con los concursantes?

Pobrecitos míos, creo que no les voy a dejar que se relajen mucho durante el programa y un poquillo perra sí que seré, ¿no veis que lo llevo en la sangre?

Dices lo que se te pasa por la cabeza, ¿no te odian un poco los guionistas?

De momento, ninguno me lo ha dicho a la cara, pero yo sé que ellos son una parte muy importante para mí; es una relación al cincuenta por ciento.

¿Alguna vez has pensado, justo después de hacer o decir algo: "Ups, aquí me he pasado"?

Puede que sea un poco prepotente, pero creo que no me he pasado nunca, es más, siempre tengo la sensación de que me quedo corta.

¿Qué crees que quiere ver la gente en la televisión con la tripa llena, justo después de comer?

Algo diferente a lo que echan en otras cadenas, yo creo que ver "Rompecorazones" es una alternativa inmejorable, más que nada porque nos lo vamos a pasar divinamente y la risa también adelgaza, si nos hemos pasado un poco con el postre.

¿Cuál va a ser el valor diferencial de tu programa?

Que le hemos puesto muchas ganas, nos lo pasamos muy bien en los ensayos y si nosotros nos lo pasamos bien, el público lo va a notar y se divertirá igual o más.

¿Qué le falta a la tele ahora mismo?

A la tele le hace falta menos ordinarieces y sensacionalismo y mas diversión.

Deborah Ombres empezó haciendo espectáculos en teatros, discotecas, bares..., ¿cómo llegaste a la tele?

Esta pregunta me la han hecho muchas veces…, ¡Pues como todo el mundo!, por un casting, o ¿qué pasa?, ¿que tengo pinta de haberme acostado con algún jefazo?

Haz balance de tu paso por la MTV, primero, y por Caiga Quien Caiga

El balance es positivo. En MTV tuve la oportunidad de aprender todo lo que sé sobre la televisión y en Caiga Quien Caiga la oportunidad de trabajar en una televisión como Telecinco con la que pude ser más conocida y llegar a más hogares.

¿Quién hay debajo del personaje de Deborah Ombres?

Una buena base y un poco menos de altura.

Ahora respóndenos a esa pregunta que siempre has querido responder pero que nunca te han hecho.

En las entrevistas siempre me preguntan lo mismo, así que cualquier pregunta original, y que no fuese: ¿cómo empecé?, ¿por qué llevo guantes? o ¿qué opina mi familia? Sería mi sueño para responder.