Tamara Falcó desvela la disparatada despedida de soltera que tuvo en Lisboa: "Al tercer día pensaba que me iban a amputar el pie"

  • Así relataba Tamara Falcó cómo terminó en silla de ruedas antes de su despedida de soltera

  • El consejo de la fisio a Tamara: “Un poco de hielo en el pie, un poco de hielo en la copa”

  • Tamara Falcó: "Mi hermana llamaba a mi pie 'el morcillo'"

La hija de Isabel Preysler ha visitado el plató de ‘Martínez y Hermanos’ y nos ha regalado confesiones y momentos muy divertidos. Uno de ellos se ha producido durante el juego de preguntas del programa, en el que Tamara Falcó confesaba algo que ocurrió antes de su despedida de soltera, que hasta el momento no conocíamos.

El programa comenzaba planteando a Tamara, si había vivido algún episodio especialmente gracioso en un viaje y la invitada confesaba: “Llegué en silla de ruedas a mi despedida de soltera en Portugal, cuando me vieron aparecer mis amigas fue muy divertido”.

Ante esta sorprendente confesión, la marquesa de Griñón explicaba como termina en silla de ruedas y decía: “La noche antes de irme, tenía prisa, iba con la maleta, con unos zapatos que me quedaban grandes, con unas gafas de sol y me caí por las escaleras”.

Después de este accidente, Tamara comenta, que la única forma de llegar hasta Portugal era en silla de ruedas y que así lo hizo. Así mismo, asegura, que lo mejor de ir en silla de ruedas hasta Portugal, fue ver las caras de sus amigas cuando la vieron aparecer.

Pero la anécdota de su despedida de soltera no terminaba ahí, la marquesa de Griñón desataba las carcajadas en el plató de ‘Martínez y Hermanos’, cuando comentaba lo que le dijo la fisio al ver lo que le había pasado y comentaba: “Me dijo un poco de hielo en el pie, un poco de hielo en la copa”.

Dani Martínez, riéndose y muy sorprendido con el relato de Tamara, planteaba: "¿Saliste de fiesta con la silla de ruedas?" y la hija de Isabel Preysler, respondía: "Salí pero con muletas, si es que no podía andar. Mi hermana llamaba a mi pie 'el morcillo', porque estaba morado e iba cambiando de color. Al tercer día pensé que me iban a amputar el pie".