El moro

Marcos Íñiguez 24/05/2011 01:27

El Papa quiere afianzar su poder ante sus estados rivales y planea casar a su hija Lucrecia con tales fines. No es fácil la elección, pero antes necesitan dinero. Rodrigo Borgia gastaron todos sus ahorros para sobornar a los cardenales que le votaron.

El príncipe turco Djem, al que su hermano quiere apartar de una posible sucesión en Constantinopla se presenta como una buena opción. Lucrecia y Juan le muestran su hospitalidad al príncipe.

Mientras, el cardenal Della Rovere acude rey de Nápoles para pedirle ayuda y terminar con el Papado de Alejandro VI. César intenta terminar de una vez por todas con su enemigo y envía al asesino Miqueletto para acabar con él. Miqueletto fracasa, pero el plan de Della Rovere no llega a buen puerto.

El Papa encuentra en Giovanni Sforza el candidato perfecto con el que casar a su hija y el dinero del príncipe Djem será su reclamo. Le ordena a Juan acabar con el príncipe turco y ganar el dinero del funeral. Juan casi estropea todo el plan y será César quien deba limpiar su trabajo. En cualquier caso, la boda de Lucrecia y Sforza ya está anunciada.