El propietario del restaurante ya no sabe qué hacer ante la oleada de hurtos que se están produciendo en su local. Los daños materiales tras los asaltos son cuantiosos, puesto que están destrozando el restaurante en cada robo, por lo que Claudio López, el dueño del mismo, ya se plantea el cierre.
La Guardia Civil continúa buscando a los ladrones, mientras el miedo y la incomprensión se apoderan de Claudio. Las cuantías de los robos son cada vez menores, puesto que ahora las compras de productos se realizan a diario, pero los destrozos no han cesado en cada intentona de los ladrones.
El propietario pide que "si vuelven a robar, por lo menos no rompan nada". "Los ladrones vana poder conmigo" asegura Claudio impotente.
Claudio guarda todas las cerraduras que ha tenido que cambiar en estos 20 días, y ningún seguro quiere hacer frente a estos robos, ante la continuidad de los mismos. "Las compañías te echan puesto que son muchas incidencias" le confirmaba a nuestra reportera. "He decidido no arreglar la máquina de tabaco" continuaba con su declaración el desafortunado dueño.
Los ladrones han llegado incluso a cenar en el propio restaurante, ante la seguridad con la que competían los delitos.