Mucormicosis

cuatro.com 26/04/2012 23:12

Un chico invidente empieza a escucharlo todo amplificado y, en una céntrica calle, se desorienta, es decir, que padece alucinaciones auditivas. Aparte, también padece diabetes. Los médicos, primero, piensan que podría tratarse de un ataque epiléptico.

Acto seguido, empieza a atragantarse con tres dientes desprendidos de la mandíbula y alojados en la garganta. House y su equipo llegan a la conclusión de que podría ser por falta de higiene en el lavado de los dientes.

No obstante, tras ir a su casa, cambian de opinión. Y es que la doctora Chi Park había probado helados y gominolas en la casa, provocándole una reacción, que sólo podía ser causada por las drogas. De esta forma, el paciente reconoce que había tomado drogas. A continuación, le detectan un punto negro, que podría significar daños cerebrales irreversibles. House cree que podría tratarse de una trombosis. Por si no fuera poco, le detectan al paciente una degeneración ocular.

Por su parte, el estado de salud del chico va a peor cuando le empiezan a arder los ojos. Con todos los síntomas, House da con lo que le está ocurriendo al paciente: se trata de mucormicosis, una infección de los senos paranasales, el cerebro o los pulmones, que se presenta, sobre todo, en personas con sistemas inmunitarios debilitados. Está causada por hongos comunes, a los que la mayoría de los individuos están expuestos, si bien las personas que tengan sistemas inmunitarios debilitados son más susceptibles a la infección. Entre las afecciones más comúnmente asociadas con esta enfermedad está la diabetes, la cual padecía el paciente.

El problema que es que la dosis que precisa para curarse le dejará sordo. El paciente, tras negar en un principio el tratamiento, lo termina por aceptar. Y éste le deja parcialmente sordo y no, totalmente, como habían previsto House y su equipo.